Alicia Munuera, la haltera del Port de Sagunt que conquista podios y sueños

A sus 15 años, Alicia Munuera Jurado no solo levanta pesas. También levanta el nombre del Port de Sagunt en cada podio. La joven haltera, integrante del Valencia Club Halterofilia, se ha convertido en una de las grandes promesas del deporte de fuerza en España, acumulando una impresionante colección de logros en campeonatos nacionales e internacionales.

En el último Campeonato de España Sub-17, celebrado en Madrid, Alicia volvió a demostrar su talento con tres medallas de plata: 66 kg en arrancada, 86 kg en dos tiempos y 152 kg en total olímpico. Gracias a esta actuación, además de sumar a la Comunidad Valenciana una medalla de plata por equipos, ha logrado clasificarse para el Campeonato de España Junior, que tendrá lugar en noviembre en Euskadi.

Pero su historia de éxito no empieza aquí. En solo dos años, Munuera ha cosechado nueve medallas nacionales -entre ellas un oro autonómico, tres platas en el Sub-15 y tres bronces en el Sub-17 de 2024-, así como un bronce internacional en el Grand Prix de Gandía, en una categoría superior a la suya.

Su progresión ha sido meteórica. El pasado verano, en el Campeonato Autonómico Junior, logró levantar un total de 124 kilos (54 kg en arrancada y 70 kg en dos tiempos), superando sus propias marcas y demostrando un nivel técnico que no pasa desapercibido para los seleccionadores nacionales.

Más allá del deporte, Alicia también destaca por su madurez y disciplina. Entrena a diario sin descuidar sus estudios, una combinación que le ha valido el reconocimiento de la Fundación Deportiva Municipal de València en 2024.

Ahora, su próximo gran reto es el Campeonato de Europa Sub-15, un objetivo que se marca con los pies en la tierra, pero la vista en lo más alto. Antes, la veremos de nuevo competir este otoño en Cullera, donde se disputará el Nacional Sub-15.

Mientras tanto, el Port de Sagunt ya mira con orgullo a su campeona. Alicia Munuera no solo levanta kilos; levanta expectativas, inspira a futuras generaciones y demuestra que el esfuerzo constante tiene recompensa. Y esto, apenas es el principio.