Joan Ribó en un pleno. EPDALa Agencia Antifraude ha finalizado la investigación sobre una subvención del Ayuntamiento de Valencia a Escola Valenciana, que se produjo a raíz de una denuncia anónima respecto a una ayuda de 25.000 euros a la entidad sin acreditar de manera suficiente el motivo por el cual no se sacó un concurso.
El Consistorio ha estado aportando información a Antifraude en los últimos meses para intentar justificar su procedimiento. Sin embargo, el instructor del expediente de Antifraude indica en su informe que no se entienden que razones explican esta concesión directa de las ayudas. Menos todavía cuando se trata de una ayuda que es concedida todos los años, por lo que no se trata de algo excepcional.
La Agencia Antifraude ha descartado las alegaciones del equipo de Gobierno, que sostenía que aunque existen otras asociaciones que se enfocan a la promoción del valenciano, destacaba el prestigio y la singularidad de Escola Valenciana para defender dicha concesión. Unas consideraciones que Antifraude ha tachado de subjetivas y que debería ser en un proceso competitivo donde se debería evaluar el potencial de cada una de las organizaciones y sus proyectos.
Por ello, Antifraude cierra el expediente e indica una recomendación para el Gobierno de Ribó: que las ayudas para la promoción del valenciano sean concedidas en una convocatoria pública, que ahora vigilará este organismo para asegurar su cumplimiento.
