El portavoz adjunto del PSOE en el Congreso y diputado por Valencia, José Luis Ábalos, ha asegurado que Mariano Rajoy deberá explicar por qué mantiene a Rita Barberá en el PP, "pese a tratarse presuntamente del cerebro de la trama de blanqueo de capitales que operaba en Valencia y que ha dejado reducido al Grupo Popular a un único concejal".
Ábalos se ha referido así a la suspensión cautelar de militancia que ayer hizo pública la dirección nacional del PP para los concejales y asesores del partido en la ciudad, vinculados a la operación Taula.
El parlamentario socialista ha llamado la atención sobre el hecho de que hayan sido los concejales los que han ofrecido al partido su marcha. "El gran drama para el PP valenciano es que desde hoy solo cuentan con un edil en la tercera capital de España y Génova continua con su inexplicable protección a la sospechosa Barberá".
El portavoz del GPS ha indicado que dos meses después de que estallara el escándalo de blanqueo en la ciudad de Valencia, "Barberá sigue sosteniendo esa inverosímil explicación de que ni sabía nada ni era responsable política de nada y, todo ello, al amparo de su amigo Rajoy, quien la protege de las medidas disciplinarias y la sostiene como senadora".
El parlamentario socialista ha señalado que "la foto fija del día para el PP sigue siendo bochornosa: 9 concejales que salen del PP pero que maniobran para quedarse en el Ayuntamiento, la ex alcaldesa, tan tranquila, en su escaño del Senado, fingiendo que nunca supo nada de lo que hacían sus más estrechos colaboradores y con la gestión de Bonig en este asunto más que en entredicho".
Según Ábalos, "sorprende que el PP no eche del Senado a Barberá pese a que cada día que pasa la ex alcaldesa devalúa un poco más la imagen de la cámara que representa la soberanía de todos los españoles. Algunos de los nuevos dirigentes del PP son conscientes del daño que Barberá le hace a su partido, pero Rajoy sigue siendo el valedor de la senadora a cualquier precio".
"Bonig debe irse"
El dirigente socialista ha asegurado que, tras la decisión de Génova y la expulsión de 18 ediles y asesores, queda en entredicho el liderazgo de Isabel Bonig. "Su credibilidad se hecho añicos, tras haber anunciado unas expulsiones que nunca llegaron a producirse y por ser incapaz de evitar la práctica desaparición de su grupo en el Ayuntamiento. Si le quedara algo de decencia debería dimitir hoy mismo".
"La mano dura con la que la presidenta del PP-CV anunció que gestionaría este asunto ha quedado reducida a una anécdota. Son los concejales los que han decidido marcharse y la dirección del PP valenciano ni siquiera se ha atrevido a expulsarlos", ha lamentado.
El PP valenciano, ha dicho, "nunca ha tenido un liderazgo tan débil como el de Bonig, que no ha logrado si quiera convencer a uno sólo de los 9 concejales investigados en este caso para que entregara su acta".
