La vida tranquila de los animales del Bioparc podría acabarse en un futuro próximo. Rain
Forest Valencia, S.A. ha presentado al Ayuntamiento de Valencia un
proyecto para los 25.000 m2 situados en la parte noreste del parque
de animales, lindando con la Avenida Pío Baroja y el Parque de
Cabecera. En dichos terrenos están ubicadas la Alquería del Rey, el
Camí del Pouet y la Casa Figuerols que actualmente están inmersas
en un plan de intervención arqueológica que será la base para la
realización del posterior proyecto constructivo. El propósito es
rehabilitar estas edificaciones para ser un gran espacio educativo,
con un albergue, un centro formativo y un aula de naturaleza, con el
objetivo de dar continuidad al fin educativo de BIOPARC, concienciar
sobre la necesidad de conservar la naturaleza y el entorno próximo.
Dicha restauración permitirá poner en valor estos edificios
históricos y posiblemente pueda ser incluida en una ruta de
alquerías de la ciudad de Valencia.
El
resto del diseño presentado está basado en dos elementos, el agua y
el aire. Y todas las experiencias girarán en torno a ellos, pues se
trata de acercar la naturaleza a la ciudad y que los visitantes
puedan disfrutarla en primera persona. La naturalización de esta
zona se inspira en África y como BIOPARC tiene un importante
componente acuático con ríos lentos y rápidos, playas fluviales o
el innovador "canyoning" donde personas de diferentes edades
podrán interactuar con el agua. Por el aire se contará con puentes
tibetanos, tirolinas y pasarelas desde las que contemplar los
paisajes africanos de BIOPARC desde lo alto.
El
objetivo es completar la experiencia vivida en el parque respetando
sus principios y valores, pues suma a la experiencia contemplativa de
la visita una experiencia activa de inmersión en un elemento
emblemático de la capital del Turia, el agua. Cabe recordar que
Valencia es la única ciudad que alberga un parque natural, la
Albufera y que BIOPARC recrea humedales africanos y se ubica en el
parque de Cabecera, la entrada del río en la ciudad. En este nuevo
planteamiento se pretende introducir a la persona en el medio natural
y, por supuesto, no se incluyen los animales.
El
proyecto completo tiene una inversión estimada entre 12 y 15
millones de euros, con una creación de 50 a 70 puestos de trabajo
directos.