Este verano está llenando de ternura cada rincón de BIOPARC Valencia con los numerosos nacimientos que se están produciendo y que, además, tienen un gran valor para la comunidad conservacionista, pues suponen un éxito en los programas internacionales de preservación de estas especies.
La protección de la biodiversidad es la gran prioridad y de nuevo cabe recordar el esfuerzo de instituciones como el parque valenciano para evitar la extinción albergando grupos de crÃa controlada cientÃficamente. Ante el continuado deterioro del medio ambiente, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), que elabora la Lista Roja, hizo un llamamiento situando como prioritario estas actuaciones para disponer de poblaciones de reserva.
En esta ocasión ha sido la zona que recrea la selva la que se ha llenado de vida y la alegrÃa ha sido doble porque las dos hembras, Akiara de 10 años y su hija Luna que nació en BIOPARC hace 4 años, han parido a dos preciosos duiker rojo de Natal (Cephalophus natalensis). El grupo de este poco conocido antÃlope africano se completa con el joven macho, Fito, de 3 años. De esta forma, BIOPARC es la institución más importante a nivel mundial en la conservación de esta especie que solamente albergan 10 zoológicos en Europa y exclusivamente puede conocerse en España en el parque valenciano.
El equipo de cuidado animal está aplicando un protocolo especial para asegurar el bienestar de las crÃas nacidas con tan solo cinco dÃas de diferencia. Mientras que Akiara es una madre experimentada y su crianza prosigue de forma óptima, la joven Luna no está generando suficiente leche, por lo que está siendo necesario suplementar con biberones para asegurar la correcta nutrición de su retoño, que supondrÃa la segunda generación nacida en BIOPARC. Ambos duikers son machos y ya han alcanzado 1 kg de peso y, por el momento, permanecen en la instalación interior.
El duiker rojo de Natal es más pequeño que otros duikers, con una altura de unos 43-46 cm y un peso de unos 11-14 kg. En BIOPARC Valencia pueden verse en un caracterÃstico recinto multiespecie que comparten con el Bongo oriental (Tragelaphus eurycerus isaaci) que se encuentra en peligro extremo de extinción, el Dik-dik de Kirk (Madoqua kirkii) y las grullas coronadas cuellinegras (Balearica pavonina).
