El Ayuntamiento de Canet d'en Berenguer ha decido proteger el alumbrado público de la corrosión provocada por los orines de los perros. El deterioro que padecen decenas de farolas por esta causa ha llevado al consistorio a implantar en las bases de estas luminarias unos collarines protectores resistentes a la abrasión.
El sistema consiste en la instalación de un collarín que se fija en toda su extensión a la superficie exterior, evitando que pueda acceder a la misma la humedad, los orines de perros o la suciedad, al encontrarse unido tanto a la estructura del fuste de la farola como a la acera o superficie de fijación del mismo.
Este protector, que podrá personalizarse con el escudo de Canet, se implantará, en una primera fase, en aquellas farolas que presenten corrosión aunque la intención es poderlo utilizar en aquellas piezas del mobiliario urbano que lo necesiten, tal y como ha adelantado el concejal de Mantenimiento y Medio Ambiente, Eduardo Almor. "El objetivo es evitar cualquier problema derivado de esta situación que pudiera afectar a nuestros vecinos, además de mantener la higiene en nuestras calles y plazas y trabajar por un municipio limpio, sin olores que genere una imagen satisfactoria de nuestro pueblo", terminaba el edil, quien hace un llamamiento a la concienciación de todos.