Luis Miralles. FOTO EPDACasa Caridad ha realizado una radiografÃa de la vulnerabilidad en València, a partir de las personas que acuden a la institución en busca de recursos para mejorar su situación.
"Lamentablemente vemos que están aumentando las personas que precisan ayuda para cubrir sus necesidades básicas, y que vienen a Casa Caridad buscando esta ayuda, pero también una red de apoyo que les permita encontrar trabajo y mejorar su situación", explica Luis Miralles, presidente de la institución.
De hecho, en el último año han crecido un 9% las atenciones realizadas en nuestro comedor social, que incluyen además de las raciones de comida, el asesoramiento y el acompañamiento personal a cada una de las 1.623 personas atendidas.
En este asesoramiento personal realizado por el Departamento de Trabajo Social, se ha detectado un aumento de la vulnerabilidad de personas migrantes que han venido a España en busca de trabajo. Se trata principalmente de hombres, de entre 31 y 45 años, y procedentes de diversos paÃses entre los que destacan Rumania, Marruecos, Bulgaria y Argelia.
"Este perfil ha aumentado un 18%, lo que, en nuestra opinión, refleja que la Comunitat Valenciana y en concreto la ciudad de València ofrece buenas perspectivas para estas personas. Pero después estas expectativas se ven inicialmente truncadas", añade Guadalupe Ferrer, gerente de Casa Caridad. "Por ello, desde Casa Caridad tratamos de crear estos puentes de integración, a través de las entrevistas personalizadas y de diversos talleres de formación estimulación y ayuda en la búsqueda de empleo". Sólo a lo largo de 2017 Casa Caridad registró 4.500 asistencias a estas sesiones.
En el lado positivo de esta Fact Sheet sobre Vulnerabilidad realizado por Casa Caridad, "vemos que han descendido los españoles sin recursos. De hecho, en la institución hemos atendido a un 3% menos de estas personas, que actualmente suponen el 39% de atenciones frente al 61% que representan los procedentes del exterior".
Además, otra de las luces de este Fact Sheet es la mejorÃa de la situación de la mujer. En el último año, en 2017, descendió un 9% el número de mujeres que precisaron nuestros primeros servicios, que incluyen la entrevista y el seguimiento personal y el acceso al comedor social.
"Con todo ello, vemos que nos estamos acercando a una situación similar a la que vivimos antes de la crisis, donde la mayor vulnerabilidad se detecta en las personas migrantes, frente a los españoles", concluye Luis Miralles.
Desde Casa Caridad trabajamos con las personas, no sólo cubriendo sus necesidades básicas, sino, a partir de ellas, ayudándoles a reducir su exposición a la exclusión. "Nos preocupa que el 62% de las personas que nos reclaman ayuda estén en edad laboral, en concreto entre 30 y 60 años. Vamos a seguir trabajando para conocer cada caso de manera individualizada y buscar solución a cada persona".
