La portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, María José Catalá. EFELa portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, ha asegurado que el nuevo proyecto de la EMT en la calle Colón, que establece un segundo carril bus y deja uno solo para vehículo privado, es una iniciativa para "generar polémica" y una "cortina de humo" para hacer olvidar el fraude en la empresa.
Así lo ha manifestado a EFE después de que el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, haya presentado este jueves la nueva red de la EMT que se estrenará el próximo día 23 de marzo y que supondrá una nueva forma de acceder al centro de la ciudad con nuevos recorridos que mejoran velocidad, regularidad y frecuencia.
"Hoy hemos conocido un nuevo proyecto sobre la calle Colón, que no es más ni menos que una cortina de humo. Generar una polémica que Grezzi sabe que va a ir en aumento porque es una calle muy comercial y referencia y creo que él ha creado esta polémica para que todos nos olvidemos del fraude de la EMT", ha apuntado la edil popular.
Catalá ha acusado a Giuseppe Grezzi de ser un "creapolémicas" aunque ha advertido de que, aunque quiere "desviar del rumbo", con ella no lo va a conseguir.
Además, ha reprochado la actitud del PSPV, socio de gobierno de Compromís en Valéncia, por "dejar que sus competencias las usurpe el Grezzi".
En un comunicado, el concejal del PP Carlos Mundina, ha alertado de que esta remodelación "provocará el colapso del centro histórico" y un "aislamiento del centro" y ha criticado que esos cambios "no se han aprobado con el consenso de residentes y comerciantes".
Además, ha advertido de que los espacios peatonales de la calle Colón no se van a mejorar, pese a que las aceras están saturadas a determinadas horas del día.
Igualmente, ha recordado que no hay un estudio sobre el impacto que puede tener el desvío de líneas de la EMT por la calle Poeta Querol en los entornos protegidos BIC del palacio del Marqués de Dos Aguas, la iglesia de la Cruz y teatro Principal.
"Los cambios en la calle Colón se van a hacer de manera chapucera sin consultar a los vecinos y comerciantes, y sin tener en cuenta las consecuencias que tendrá en los barrios adyacentes del Pla de Remei, San Francesc, Gran Vía y Russafa, que podrían convertirse en verdaderas ratoneras", ha asegurado.
Mundina ha explicado que "los desvíos de tráfico que quieren imponer Ribó y Grezzi no van a mejorar la seguridad y movilidad de los peatones, porque en principio el proyecto no contempla mejoras en las aceras".
"Sería necesario, por tanto, adoptar medidas que eviten el estrangulamiento actual de la circulación y que garanticen la comodidad y seguridad de los peatones, así como la entrada y salida de vecinos, transporte público y proveedores", ha valorado.
A su juicio, "habría que hacer una nueva ordenación de todo el tráfico del centro de la ciudad, cogiendo como ejemplo válido las reformas de aceras y calzadas en Ruzafa y el Eixample, y no como va a hacer Ribó aislando el centro y desviando el tráfico por los barrios adyacentes que pueden convertirse en ratoneras".
