La alcaldesa de València, María José Catalá, ha afirmado que la realidad es que la ciudad "celebra la diversidad, la posibilidad de amar libremente y el respeto de todas las personas" con motivo del Día del Orgullo, y trabaja para "restablecer y afianzar" la confianza en su gobierno de algunas asociaciones LGTBI.
Catalá ha dicho que se queda con eso y ha reclamado que no es bueno que la política "se meta en todo" porque ya tiene sus espacios, para señalar que no tiene la sensación de "enfrentamiento" entre el Ayuntamiento y "algunos representantes, algunas asociaciones muy importantes" del colectivo LGTBI, que han decidido "dar un paso al lado" en la celebración de la fiesta del Orgullo.
En este sentido, ha hecho un llamamiento porque se está trabajando con esas asociaciones para "restablecer y afianzar" su confianza en el gobierno local, según ha asegurado.
Y considera no adecuado que solo los gobiernos de izquierdas "pudieran celebrar" el Orgullo, porque sería "renunciar a una parte de la sociedad, renunciar a una parte del colectivo y no me parece lo mas acertado", ha declarado.
Ha insistido en que la fiesta del Orgullo y la diversidad es una cuestión transversal, que no pertenece a ninguna bandera política y sí a la sociedad, y por eso es "bueno" que todas las administraciones, estén gobernadas por el signo que sea, celebren el Orgullo y lo hagan "con absoluta normalidad".
Respecto a la asistencia del Ayuntamiento o de concejales del PP en la manifestación del Orgullo, la alcaldesa ha asegurado que el partido "da absoluta libertad" a sus representantes todos los años para acudir, si bien ha puntualizado que ese día, 28 de junio, se celebra pleno del Ayuntamiento, como ya ocurrió en la anterior legislatura, según ha concretado en alusión a los "malpensados".
Además, la celebración del Orgullo en València es "una evidencia" en las calles, los soportes de publicidad urbanos y las traseras de los autobuses, así como en un acto celebrado ya este jueves en Russafa, donde acudieron 500 personas y fue "un éxito", en alusión al espectáculo "Libérate", un show nocturno de Drag Queens, totalmente financiado por el Consistorio, con monólogos y con las cuatro mejores travestis del panorama valenciano.