Romeria de Sant Pere en Catarroja. - EPDAEste domingo, Catarroja ha vivido una jornada marcada por la emoción, la devoción y el reencuentro con sus raÃces más profundas durante la tradicional RomerÃa de Sant Pere, una fiesta que este año ha dado un paso adelante al solicitar formalmente su reconocimiento como Fiesta de Interés TurÃstico Local. La dana de octubre ha estado en la mente de los participantes.
Desde primera hora, vecinos y vecinas del barrio de Las Barracas y del municipio en general acompañaron la imagen del patrón de los pescadores en su recorrido desde la Iglesia de San Miquel hasta el Puerto. El ambiente festivo y cargado de simbolismo culminó con la misa tradicional celebrada en medio del lago de la Albufera, rodeada de embarcaciones de festeros, autoridades y público.
Uno de los momentos más emotivos fue la bajada a hombros de la antigua anda con forma de barca, testigo de varias riadas históricas, que fue trasladada hasta el Puerto. AllÃ, tras un almuerzo popular, comenzó el traslado fluvial de la imagen, acompañado de música, cantos tradicionales y la bendición del lago, el pescado y el arroz.
La alcaldesa, Lorena Silvent, destacó que esta fiesta es "mucho más que una tradición: es una muestra viva de nuestra cultura, historia y entorno natural, conectándonos con nuestros pescadores y nuestra identidad".
La celebración continuará durante la próxima semana con diversas actividades abiertas a todo el pueblo: el martes y miércoles habrá meriendas populares en Las Barracas; el viernes 27 de junio tendrá lugar la gran cabalgata en honor a Sant Pere, uno de los actos más festivos y participativos; y el sábado 28 de junio arrancará con el tradicional pasacalles de los festeros, seguido del homenaje a los pescadores en el parque de Las Barracas y la misa en honor al patrón. La jornada concluirá con la solemne procesión nocturna por las calles del barrio, cargada de simbolismo y emoción.
Con más de 65 años de historia, la RomerÃa de Sant Pere y las celebraciones que la acompañan se consolidan como uno de los actos más arraigados y significativos de Catarroja, siendo una pieza clave del patrimonio festivo y cultural del municipio.
