El concurso de allipebre de años anteriores. EPDAEste evento congrega cada año a miles de personas en el Port de Catarroja y se enmarca en las fiestas patronales en honor a Sant Miquel. El Ayuntamiento reparte cerca de 3.000 raciones para que los asistentes degusten este plato típico en un municipio reconocido como Cuna del Allipebre.
El consistorio proporciona a los 150 participantes los ingredientes y la leña necesarios para cocinar, que se hace al aire libre, aunque los comensales disponen de una carpa, instalada por el Ayuntamiento, para el momento de sentarse a la mesa.
Una vez cocinados, los platos son juzgados por un tribunal de especialistas y pescadores locales que se reúnen para degustar el plato y repartir los premios entre los vecinos y vecinas que hayan participado. El primer premio es de una cuantía de 600 euros, el segundo de 400 euros y un tercero de 200 euros.
No obstante la Gran Entrada de Moros y Cristianos, prevista para las 11 de la noche, sigue adelante, en espera de que mejoren las previsiones meteorológicas para esa hora y puedan estrenarse bajo la denominación de Fiesta de Interés Turístico Provincial.
Las filàs esperan con impaciencia el momento en el que las capitanías, mora, por parte de Al-Bhuera, y cristiana, de Contrabandistes, desplieguen sus boatos y hagan vibrar al numeroso público que se congrega cada año a lo largo del recorrido.
