El pasado 27 de julio el Ayuntamiento de Utiel comunicó, a través de sus redes sociales, el cierre de su 'Piscina Pública Municipal' tras encontrar restos fecales en la piscina de toboganes. Tras el hallazgo, los responsables procedieron a la clausura del espacio y su posterior desinfección, la cual ya está en marcha. Hasta el momento no se ha establecido ninguna fecha de reapertura, sino que será la recuperación de los parámetros del agua lo que determinará cuándo se vuelve a usar el recinto bajo total seguridad sanitaria y sin consecuencias de estos actos incívicos.
Asimismo, el Ayuntamiento, en el mismo comunicado, apela a la responsabilidad ciudadana. "El mal comportamiento de unos pocos afecta a todos" , afirmaba la entidad municipal el día de ayer en su comunicado.
Utiel se suma así a las más de 300 piscinas afectadas hasta el momento este verano por un acto incívico que se ha vuelto tendencia: defecar en las piscinas, tanto públicas como privadas. Una situación que cada vez empieza a ser más difícil de controlar de forma preventiva y que pone en mucho riesgo la salud, en especial la de niños y personas con heridas abiertas.