Comienzan a llegar los ninots de la falla municipal a la Plaza del Ayuntamiento
Hasta el lugar se ha acercado bastante gente, que se ha parado para hacerse fotos y selfis con la paloma ya encarada hacia la fachada de la Casa Consistorial, y con el pato amarillo
EFE - 05/03/2024
Un pato de goma gigante, el primer ninot de la falla municipal en llegar a la plaza del Ayuntamiento de Valencia, en una imagen compartida por el Consistorio.
Un camión transporta dos ninots de palomas de la falla municipal a la plaza del Ayuntamiento de Valencia, en una imagen compartida por el Consistorio.
La falla municipal de Valencia empieza ya a tomar forma en la plaza del Ayuntamiento con las palomas que coronan el monumento y con el pato de goma amarillo, que se han convertido en el objetivo principal de fotos y selfis de los curiosos que se acercan al lugar.
El gran pato amarillo que simula a los patos de goma es uno de los ninots de este monumento, centro neurálgico del turismo de la ciudad en Fallas y que lleva por tÃtulo "Dos palomas, una rama", diseño del artista urbano valenciano Escif y hecha por el artista fallero Pere Baena como un llamamiento a la paz.
"La guerra es separación y la paz unión. La guerra parte de dos caminos y la paz de uno y solo se puede llegar a la plaz entendiendo que el otro y tú sois lo mismo", continúa con su explicación.
Hasta el lugar se ha acercado este martes bastante gente, que se ha parado para hacerse fotos y selfis con la paloma ya encarada hacia la fachada de la Casa Consistorial, y con el pato amarillo.
Algunas de las personas que se han acercado a la plaza del Ayuntamiento han reconocido a EFE que "València ya huele a Fallas" y han explicado que intentan adelantarse a ver los monumentos "antes de que haya más gente".
En los próximos dÃas irán apareciendo piezas tanto en la plaza del Ayuntamiento como en el resto de localizaciones de fallas hasta la plantà oficial del dÃa 15.
Sobre todo atraerá al público el montaje de las de los monumentos de la Sección Especial, las de máxima categorÃa, siempre espectaculares por su dimensión y su equilibrio casi imposible.