El pleno del Ayuntamiento de Valencia ha aprobado por unanimidad remitir a la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Conselleria de Cultura la solicitud para regularizar la situación del Museo Fallero, lo que constituye el último paso legal para que la entidad tenga carácter pleno y reconocido de museo. La propuesta ha sido defendida por el portavoz de Compromís, Pere Fuset, que ha señalado que, en estos momentos, el Museo Fallero, "el máximo exponente de la cultura fallera y uno de los más visitados de la ciudad, no es más que un almacén de ninots".
Fuset ha recordado que el anterior equipo municipal manifestó en numerosas ocasiones que estaba trabajando para que la Conselleria de Cultura regularizara el Museo Fallero y lo incluyera dentro del catálogo museístico, pero "todo era una mentira. A pesar de una propuesta de acuerdo de 2012, el PP no había hecho nada y no era tan difícil, porque para el pleno reconocimiento del Museo Fallero tan solo hacía falta nombrar un director, establecer un plan museológico y presentar la solicitud a la Conselleria. Este gobierno ha cumplido los dos primeros requisitos y el último se debate hoy en el Pleno. Era cuestión de voluntad y ganas de trabajar y sobre todo de reconocer que la fiesta es cultura".
El concejal del Grupo Popular Félix Crespo ha respondido a Fuset que "no tiene que dar lecciones respecto al museo, sino empezar a buscarle un nuevo emplazamiento digno de su importancia. Nuestro trabajo ha permitido que sea el más visitado de la ciudad. Además, si el director que han escogido escribió hace ya tiempo un catálogo razonado del Museo es porque había un trabajo detrás que permitía reconocerlo como tal".
Por su parte, la concejala de Ciudadanos Amparo Picó ha pedido que se dé el mismo reconocimiento al Museo de la Semana Santa Marinera y al de las Rocas del Corpus. Pere Fuset ha recogido la propuesta, recordando que Gil-Manuel Hernández Martí, el director del Museo Fallero, será también coordinador de los otros dos museos festivos de la ciudad.
