El día doce de julio del año 1975, hace cincuenta años, el periódico Levante, publicaba un interesante artículo escrito por el Corresponsal de Casinos: Antidio Domingo, que nos hablaba de las Cosechas de Casinos de aquel año.
Nos decía: "Siguen desarrollándose en el campo las labores propias del tiempo. En los viñedos prosigue tirándose sulfato para combatir el "mildiu", azufre para combatir la "negreta", así como el esporgado y "refillolar" las mismas, faenas que resulta imprescindible para que la uva engorde y evite muchas plagas y que este año quedarán muchas sin poderlo realizar por falta de mano de obra.
En cuanto al arbolado la cosecha de la aceituna y de la almendra será nula y los melocotones tempranos se han vendido a peso, a razón de catorce pesetas el kilogramo: las "cotiguas" aún no han entrado en período de madurez y a ojo se realizan pocos tratos, habida cuenta que sólo de aclarar el fruto el agricultor ha pagado precios elevados, sin contar los demás trabajos de dicho árbol que recibe muchos y muy engorrosos, con peligro por los tratamientos insecticidas que se realizan.
Los albaricoques se han pagado a seis pesetas y cincuenta céntimos el kilogramo a peso, teniéndolos que coger el propio agricultor. Y de los higos y algarrobos no vale la pena mencionarlos, pues, son cosechas minoritarias que acabarán por desaparecer".
FUTURO REGADÍO. Empresa Corsan.
"Por la misma empresa constructora del canal que ha de traer, las aguas del pantano de Benagéber, se está procediendo a construir los entraderos-puentes para poder entrar en las parcelas colocando así los tramos que quedaban por colocar y haciendo los sifones necesarios, con lo cual ya podrá el agua circular desde dicho pantano hasta estas tierras sedientas".
Cincuenta años después, podemos hablar de la desaparición de los viñedos en nuestros campos, al igual que pasó con los sabrosos melocotones de secano. La importante transformación agraria en nuestros términos, nos ha hecho pasar de unas tierras de secano con tremendos problemas a conocer nuevos cultivos que en aquel momento eran impensables, hoy las naranjas son una realidad, se mantienen los olivos y almendros, quedan algunos algarrobos, a pesar de que en la actualidad se están plantando nuevas variedades, haciéndose realidad el sueño de que los campos que nunca se regaron, hoy son huerta y a goteo.
Recuerdos a los trabajos de aquellos agricultores que vieron este proceso desde la eternidad. La frase más socorrida de un agricultor es pensar siempre en el año que viene.