La historia se repite. Y, cada 4 años, cuando se aproximan las elecciones autonómicas al Parlamento valenciano, algún grupo catalán independentista le echa el ojo al electorado valenciano. Y, aunque siempre fracasan, lo intentan una y otra vez. En la última década, cuando Esquerra Republicana de Catalunya estaba en la cresta de la ola, gastó dinero a espuertas en conseguirlo. No tuvo fortuna. Y ahora lo ha hecho el partido revelación de las pasadas elecciones catalanas, el SI, que logró 4 diputados. SI lo vuelve a intentar, más que para obtener diputados en les Corts Valencianes -con lo que le cuesta a los nacionalistas valencianos y valencianistas-, con las miras puestas en Cataluña, donde estas iniciativas en el Antic Regne caen en gracia.
Por todo ello, y por ese punto de exhibicionista que tiene, ha estado en Valencia el presidente de Solidaritat per la Independència Catalana (SI), diputado autonómico catalán y ex presidente del Barça, Joan Laporta, para presentar su formación en el 'cap i casal'. La enésima provocación del catalanismo más radical y rancio ha obtenido la respuesta de otro grupo radical, en este caso valenciano, como el Grup d'Acció Valenciana y el Coalició Valenciana, el partido que fracasó estrepitosamente en los pasados comicios y que lidera el polémico abogado Juan García Sentandreu.
En definitiva, nada nuevo bajo el sol. Y si no fuera porque el que ha venido en esta ocasión a provocar es el mismísimo ex presidente del Barcelona F. C., la noticia no habría supuesto ni un breve en los periódicos españoles. Sin embargo, el encontronazo entre independentistas y anti catalanistas, que nos retrotrae momentáneamente a los años 80, ha ocupado espacios incluso en las televisiones nacionales.
Con una pancarta de 'Benvingut a València' lo recibían simpatizantes valencianos, además de miembros del Partit
Socialista d'Alliberament Nacional dels Països Catalans (PSAN), Nuria
Cadenes y Josep Guia y la escritora Isabel-Clara Simó. En el acto han participado, además de Laporta, los diputados Antoni Struell, Uriel Bertran y el saguntino, y por tanto valenciano, Alfons López Tena, afincado en Barcelona.
El acto, realizado en el hostel Astoria de Valencia, muy cerca de la plaza del Ayuntamiento, ha sido boicoteado por decenas de personas de Coalició Valenciana, el GAV y miembros del partido de extrema derecha, España 2000, que intenta abrirse hueco entre el anti catalanismo valenciano, ausente de la vida pública valenciana desde que UV quedó fuera de las principales instituciones valencianas allá por el año 1999. 'Laporta, veste'n a ta casa, fora terroristes del Regne' fue una de las frases que se podían leer en las pancartas, mientras se escuchaban gritos como 'Som valencians, mai catalans' o 'Puta Laporta, puta Catalunya'. Poesía pura, vamos.
Laporta, consciente de que estas polémicas le benefician, trasladó a los medios su alegría por estar en Valencia y restó importancia a lo sucedido fuera del hotel, así como dentro, pues un grupo de anti catalanistas lo insultaron y le echaron polvos 'pica pica' que provocó los estornudos de los presentes.
La guerra de Valencia, versión naïf y cutre, de los catalanistas y anti catalanistas trasnochados.
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