Detalle de las espuelas de un ejemplar de gallo de pelea. EFE-Archivo
Según expone el Ministerio Público en su escrito de calificación, al que ha tenido acceso EFE, el acusado fue descubierto en mayo de 2017 criando un total de 134 animales en un corral anexo a su vivienda sin autorización administrativa ni las medidas de higiene necesarias.
Del total de animales, 77 eran gallos de pelea y la "práctica totalidad" presentaba crestas manipuladas por amputación, espolones afilados y afeitado de las plumas en zonas ventrales y patas, todo ello con el objetivo de hacerles participar en peleas.
Dos de ellos, además, presentaban lesiones faciales y otro habÃa perdido un ojo como consecuencia de las peleas entre ellos.
"Dichas modificaciones anatómicas causan graves heridas, dolor intenso, mayor sensibilidad a infecciones y alteraciones de la homeostasia, que puede derivar incluso en la muerte", expone el fiscal.
Por todo ello, se acusa al propietario del corral de un delito continuado de maltrato animal, se reclama una pena de prisión de un año y el decomiso definitivo de los animales intervenidos.
La celebración del juicio por estos hechos está prevista para hoy en el Juzgado de lo Penal número 6 de Valencia.
