El
presidente de la gestora del PP de Valencia ciudad, Luis Santamaría,
se ha comprometido a revertir el "caos circulatorio que está
generando Ribó y que es uno de los principales quebraderos de cabeza
de los valencianos en estos momentos". El dirigente popular ha
realizado estas declaraciones durante una comparecencia pública en
Ciutat Vella donde ha denunciado los principales puntos negros de la
gestión del equipo de Gobierno que encabeza Joan Ribó.
Santamaría
ha lamentado que "los dos grandes hitos en movilidad del
tripartito ha sido ponerle faldas a los semáforos y alterar su
frecuencia". Con estas actuaciones, ha explicado, "han conseguido
que en cualquier punto de la ciudad un desplazamiento cueste ahora un
30% más del tiempo que se empleaba antes en hacerlo".
Los
cuellos de botella en zonas como Guillem de Castro, la calle Colón o
la orilla del río junto a las Torres de Serranos "provocan un
continuo embotellamiento". También las peatonalizaciones
realizadas, principalmente en Ciutat Vella "se han hecho de espalda
a los vecinos, sin diálogo" y ha propuesto que en el futuro este
tipo de actuaciones el. PP "buscará siempre el consenso porque es
básico para tener una ciudad mejor".
La
principal y más urgente demanda que Santamaría ha reclamado a Ribó
es que "empiece por hacer que funcionen los servicios básicos como
los de limpieza, recogida de basuras y circulación para a partir de
ahí construir la Valencia que necesitan los valencianos".
Despertar
del letargo
"Valencia
necesita despertar del letargo del Gobierno de Ribó, que trabaja
poco, está dormido y hace inviable un modelo de ciudad de futuro"
ha señalado Santamaría.
Las
plagas de ratas y cucarachas es otro de los problemas de salubridad
que se vive en las calles de la ciudad y que según Santamaría
afecta ya "a más de una treintena de viales donde no están siendo
controlados los focos de infestación".
Ha
recordado que "Ribó tampoco está frenando el botellón que causa
muchos problemas de convivencia en barrios como Benimaclet".
Igualmente, ha lamentado el "enorme abandono en alcorques que no
se cuidan y que ahora el tripartito propone de manera sonrojarte que
nos ocupemos de uno por ciudadano, así como los árboles talados y
naranjas que no se recogen".
Santamaría
ha denunciado también el abandono de solares y ha puesto como
ejemplo de degradación algunas zonas de Ciutat Vella, como la calle
Salinas, "a pocos metros de donde se concentra una buena parte de
la oferta turística. ¿Cómo vamos a ofrecer así una ciudad moderna
que aspira a ser la capital española del Mediterráneo?", se ha
preguntado.
También
ha denunciado los problemas de convivencia con la ocupación "porque
son una serie de mafias que luego alquilan a costes abusivos los
inmuebles a personas con necesidad. No están funcionando los
servicios sociales como se ve en Orriols o en el Cabanyal y esta
problemática se está extendiendo".
Grezzi
no puede seguir en el cargo
Luis
Santamaría ha exigido también al alcalde, Joan Ribó, que
"destituya de manera inmediata" al edil de Movilidad Sostenible,
Giuseppe Grezzi, por sus "continuos y furibundos ataques que no
caben en democracia" y ha puesto como último ejemplo las
descalificaciones contra el delegado del Gobierno en la Comunitat
Valenciana, Juan Carlos Moragues, como consecuencia de la actuación
policial en los incidentes del pasado 9 d'Octubre.
Santamaría
ha recordado a Ribó que "ha llegado el momento de que actúe
contra una persona que tiene el insulto y el extremismo como modo de
proceder". Grezzi acusó a Moragues en su cuenta oficial en una
conocida red social de ser "cómplice" de quienes protagonizaron
incidentes durante la manifestación vespertina del día grande de
los valencianos.
Aseguró,
en concreto, que Moragues era "cómplice de los terroristas nazis
que aterrorizaron a la gente" y también de que los agresores no
habían sido detenidos porque al delegado del Gobierno "no le da la
gana". Estas afirmaciones, según ha explicado Santamaría, "son
del todo inaceptables en democracia y menos partiendo de un cargo
público que debe tener la prudencia y la mesura como guía".
En
este sentido, ha recordado que Grezzi también acudió a dar soporte
a una manifestación no autorizada frente a la sede de la Delegación
del Gobierno en Valencia en la que se lanzaron consignas como
"policía tortura, asesina y fascista" y que han causado un
profundo malestar en los cuerpos de seguridad.
"Estáis
deseando que vuelva Franco"
El
edil de Movilidad Sostenible ha protagonizado esta legislatura otros
enfrentamientos que para el presidente de la gestora "definen su
talante" como cuando se enfrentó a los vecinos de Abastos durante
una reunión sobre cambios de líneas de la EMT y ante las críticas
de algunos de los presentes les espetó que "estáis deseando que
vuelva Franco".
Por
todo ello, Luis Santamaría ha exigido al alcalde de Valencia que
"tome medidas ya y Grezzi no siga ni un minuto más en su cargo
porque ha mostrado sobradamente su incapacidad para dialogar de
manera tolerante y su odio visceral contra todos los que le critican
o representan la ley y el orden democrático".
Paralelamente
a la petición de dimisión el delegado
del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, ha
puesto en conocimiento de la Abogacía del Estado las manifestaciones
públicas de Grezzi porque quiere
saber si considera que estos mensajes podrían ser constitutivos de
algún delito para después estudiar si emprende acciones legales.