El alcalde de València, Joan Ribó (Compromís), y la portavoz socialista, Sandra Gómez, a su llegada al Teatro Rialto. EFE-Archivo
También celebran que Compromís haya "desistido" de una propuesta que, en su opinión, "no tenía un encaje legal e incluso quedaba al margen de los cánones democráticos de cualquier estructura de gobierno", en alusión al modelo gerencial de áreas.
"No era un posibilidad política ni administrativa aceptar generar una estructura en paralelo de gobierno al democráticamente electo y por tanto no es una renuncia, sino volver a la posición de partida", han asegurado en el comunicado.
A su juicio, la propuesta planteada por Compromís era "una ocurrencia o incluso globo sonda para evitar asumir una propuesta razonable y sincera de conformar un gobierno de conjunto".
Desde el PSPV-PSOE aseguran que siguen "apostando por un modelo Botànic defendido por la propia coalición de Compromís en la Generalitat Valenciana y por el Partido Socialista".
Por ello, consideran que "lo razonable" pasa por "llegar a un acuerdo como se ha hecho en la Generalitat, donde el PSPV-PSOE ha esgrimido una posición de responsabilidad porque así lo quieren los ciudadanos y ciudadanas progresistas".
"No podemos perder el tiempo con propuestas irrealizables y pedimos que se levante el veto al modelo del Botànic", han concluido en su comunicado.
Compromís, por su parte, asegura estar dispuesto a renunciar al "modelo gerencial" que proponían en su programa electoral al Ayuntamiento de València y pasar a un modelo de coordinaciones de área, con la esperanza de conformar un gobierno municipal de coalición "estable y de progreso" con el PSPV.
El equipo negociador del partido de Joan Ribó añade que, si el PSPV lo exige, estaría dispuesto también a que no hubiera ningún coordinador de área o, en caso de que los hubiera, que siempre estuvieran supeditados al concejal o concejala de área, según han informado desde Compromís mediante un comunicado.
Este partido ha pedido, a su vez, que el PSPV reconsidere su exigencia de una vicealcaldía como condición para conformar gobierno, según se ha puesto de manifiesto en la octava reunión de la negociación que ambos partidos mantienen en las últimas semanas.
De esta manera, según el modelo que planteaba Compromís, el Ayuntamiento se estructuraría en un conjunto de delegaciones agrupadas en concejalías y en áreas, como en la actualidad, y las delegaciones competenciales próximas entre sí estarían bajo una misma área.
Para no establecer conflictos de competencias ni estrategias de gobierno en paralelo, Compromís considera necesario un "modelo de funcionamiento como el del mandato 2015-19, en que el alcalde delegó sus competencias sobre los concejales de gobierno y, cuando hubo opiniones diferenciadas, se optó para resolverlas en una junta de portavoces de gobierno para llegar a posiciones consensuadas".
Según el comunicado, este mismo modelo es el que se ha seguido en todas las ciudades donde hay un pacto de gobierno entre Compromís y el PSPV y es el que el partido de Ribó también reclama para la ciudad de València.
