La comarca del Camp de Túria no solo crece en habitantes, también en años de vida. Según los datos publicados recientemente por el Instituto Valenciano de Estadística (IVE) en referencia a 2023, la comarca es la que cuenta con la esperanza de vida más alta de toda la Comunitat Valenciana, tanto en hombres como en mujeres.
En cifras, los hombres del Camp de Túria viven de media 81,4 años, mientras que las mujeres alcanzan los 86,5 años. Si nos fijamos en la esperanza de vida a partir de los 65 años, los datos siguen siendo igual de positivos: los hombres suman 20 años más de vida, y las mujeres 23,6 años adicionales. Son las cifras más elevadas del mapa autonómico, por encima incluso de comarcas tradicionalmente consideradas "saludables", como la Marina Alta o l'Alacantí.
Más población y salud
El Camp de Túria destaca además por tener la menor tasa bruta de mortalidad de la Comunitat Valenciana: 6,9 defunciones por cada 1.000 habitantes, muy por debajo de la media autonómica y muy lejos de las comarcas más envejecidas del interior, donde la mortalidad supera el 16‰.
Lejos de ser una excepción demográfica, esta realidad está conectada con un fenómeno claro: la población no ha dejado de crecer en los últimos años. Ciudades como Llíria, La Pobla de Vallbona o Bétera han experimentado un importante aumento de habitantes, en parte por el efecto llamada de quienes buscan una vida más tranquila, sin alejarse demasiado de la capital. La mejora de las infraestructuras, los servicios públicos y la calidad ambiental han sido claves.
El Camp de Túria ha sabido combinar su cercanía con la ciudad de Valencia con un estilo de vida más pausado, que muchas familias jóvenes y personas mayores valoran cada vez más, especialmente después de la pandemia del coronavirus.
No es raro encontrar perfiles que huyen de la ciudad por el precio de la vivienda o por el ruido, y encuentran en comarcas como el Camp de Túria un buen equilibrio entre naturaleza, vivienda asequible y servicios de calidad.
Cifras positivas en natalidad
Los buenos datos del Camp de Túria no solo se explican por su baja mortalidad, sino también por su dinamismo demográfico: en 2023 fue la sexta comarca con mayor tasa bruta de natalidad de toda la Comunitat Valenciana, con 6,9 nacimientos por cada 1.000 habitantes. Este índice supera ampliamente al de muchas zonas del interior y se sitúa muy cerca del de comarcas tradicionalmente más jóvenes como la Ribera Alta o la Vega Baja.
Aunque la edad media de maternidad en la comarca se sitúa en los 32,7 años, una cifra alta y acorde con la tendencia general de la Comunitat, el índice sintético de fecundidad -con 1,2 hijos por mujer- es ligeramente superior a la media, lo que confirma el dinamismo social y familiar del territorio.
Futuro en la comarca
¿Qué explica estos indicadores tan positivos en una comarca que hasta hace unas décadas era predominantemente agrícola y dispersa? Una combinación de factores: buenos accesos a Valencia, un entorno natural privilegiado, una red de servicios educativos, sanitarios y sociales en expansión, y una oferta de vivienda variada, que ha sabido responder a la demanda de nuevos residentes sin perder su identidad.
A eso se suma una creciente preocupación por la salud, la alimentación y el bienestar, visible en la cantidad de instalaciones deportivas, rutas naturales, mercados de producto local y actividades al aire libre que se organizan en sus pueblos y ciudades.