Los representantes le expusieron la problemática, no solo a nivel de seguridad con cerca de cien personas que han perdido la vida en las vías, sino también los perjuicios de la salud por la contaminación acústica de los pitidos de los trenes, porque parte del trazado de las vías afecta también al barrio de la Torre.
"Se mostró muy sorprendido de que en el área metropolitana tan cercana a Valencia estuviera ocurriendo esto y de que se esté haciendo un estudio para un paso peatonal en lugar de un soterramiento", explican desde la plataforma. "Se prestó a ayudarnos en todo lo posible, porque no tiene competencias en esta materia y nos ha instado al ministro de Transportes. Es un paso más", añaden, "pero vamos arrancando compromisos".
El segundo de los encuentros ha sido con la Confederación de Asociaciones Vecinales de Valencia (CAVE-COVA), concretamente con el vocal de Movilidad, Xavier García, en el que han hablado del proyecto de soterramiento que data de 2001 firmado por José Vicente Dómine, "que está caduco y se tendrían que volver a hacer los estudios".
García ha mostrado su apoyo a la Plataforma para los próximo actos reivindicativos, invitándoles a una reunión conjunta con Dómine, además de con CGT y sindicatos ferroviarios, que tendrán lugar en los próximos meses de enero y febrero.
Además, han valorado el coste del soterramiento que "como mucho, lo más caro sería de 50 millones por kilómetro por lo que el máximo presupuesto para soterrar el tramo sería de 100 millones". De igual modo, García ha explicado que los trenes de mercancías se van a desviar con las próximas actuaciones previstas hasta la Fonteta de Sant Lluís.
"Es un grave problema de barrera urbanística y contaminación acústica y debe ser la administración pública la que lo solucione con la participación de los vecinos", ha apuntado García en la reunión.
