"Esta evaluación de riesgos consiste básicamente en pasar por la zona con un autobús y estudiar posibles puntos negros, complicaciones en los giros o la situación de las paradas. Pero el problema es que se hará por la mañana y el volumen de gente que habrá es considerablemente inferior al de la tarde-noche. Dudo que ese informe sea concluyente", explica Rabadán en declaraciones a EFE.