Concentración ante la Catedral de Valencia. -EFEMujeres cristianas valencianas han reclamado a la Iglesia pasos decididos para avanzar en igualdad y fortalecer la corresponsabilidad de todos sus miembros, y no mantener tradiciones, estructuras culturales y doctrinas de épocas pasadas si van en contra de la dignidad y la igualdad de todas las personas.
El movimiento "Alcem la veu" de mujeres en la Iglesia de la Diócesis de Valencia se ha concentrado este domingo en la plaza de la Virgen con el lema "Caminamos juntas por la igualdad y la dignidad en la Iglesia".
Ante la Catedral de Valencia han realizado un acto simbólico en el que piden a la Iglesia que se ponga en la piel de las mujeres, a las que históricamente se ha negado su participación en términos de equidad, coincidiendo con la próxima conmemoración el 8 de marzo del DÃa de la Mujer.
Desde su constitución en marzo de 2020 se ha ido extendiendo el movimiento y se ha coordinado a nivel internacional con el Consejo de Mujeres Católicas (CWC) para celebrar un sÃnodo, un proceso de diálogo y de escucha sobre la situación de las mujeres en la Iglesia.
Se ha desarrollado de forma paralela al convocado por el papa Francisco que también pretende abrir la Iglesia a los nuevos tiempos, replanteándose sus formas de hacer, de organizarse y de llegar a la gente, según informan fuentes de "Alcem la veu" en un comunicado.
Entre las conclusiones del SÃnodo de las Mujeres entregadas al Vaticano y a las diferentes diócesis del Estado español, se destaca la necesidad de recuperar la comunidad de Jesús de Nazaret, que contradice el funcionamiento actual de la Iglesia, y que conllevarÃa fortalecer la corresponsabilidad de todos sus miembros.
"Como sujetos activos en la Iglesia queremos que se ensanche nuestro espacio y corresponsabilidad y para ello es importante favorecer el empoderamiento y la formación de las mujeres, asà como crear redes de diálogo y apoyo mutuo", señalan.
Proponen además que se fomente el uso del lenguaje inclusivo y la simbologÃa femenina en la liturgia, en las acciones pastorales, en los documentos eclesiales y materiales catequéticos.
Su objetivo es lograr una Iglesia menos jerárquica y más circular, una comunidad de iguales, al servicio de las personas empobrecidas y excluidas.
La convocatoria de actos públicos se lleva a cabo en un total de 17 ciudades españolas.
