De la noche a la mañana, el muro que hay delante del local en el que se ubica la tienda Primark en Valencia, ha amanecido pintado a modo de denuncia social. En el mural aparecen unas niñas de piel morena cosiendo ropa mientras son vigiladas por un hombre adulto, que sujeta lo que aparentemente podrÃa ser una vara.
Además de pretender denunciar las condiciones a las que se somete a los trabajadores de la "fast fashion", el mural también invita a reflexionar sobre el impacto que tienen los bajos precios de la ropa.
La imagen, que ha sido publicada en redes sociales ha sido compartida por miles de usuarios hasta viralizarse. Pero, además, ha abierto el debate sobre la falsa moral de la industria de la moda, en concreto de la "fast fashion".