Quitan parte de los ninots de la falla Reino de Valencia por riesgo de derrumbe

Las tormentas han pasado factura a la falla Reino de Valencia, que ha forzado que los bomberos tengan que retirar parte de los ninots por el riesgo de que se caiga y pueda afectar a los visitantes. De hecho, la comisión de la falla cerró el acceso al interior del monumento tras detectarse una grieta en la parte trasera de la figura central y que esta empezara a vencerse hacia atrás.

El presidente de la comisión, Vicente Hércules, ha relatado a EFE que las lluvias agrietaron la parte trasera de la cintura de la figura central -una mujer que representa a Lucrecia Borja-, y se ha ido venciendo la parte de arriba, "que tiene mucho riesgo y pesa bastante".

"Somos de sección Especial y normalmente se visitan los ruedos, pero hemos decidido dejarlo cerrado y que se vea desde fuera, por precaución", ha señalado Hércules.

Ha explicado que en el momento en que se dieron cuenta de la grieta los bomberos estaban en la zona revisando las fachadas para la cremà, por lo que inspeccionaron la falla y consideraron que no había un riesgo inminente de caída, pero les pidieron que les avisaran si se vencía más para tomar medidas y valorar la situación.

El sol de esta mañana ha favorecido la evaporación del agua, pero la comisión fallera mantiene la vigilancia y las medidas de precaución en el entorno del monumento.

Se da la circunstancia de que esta falla, del artista Sergio Musoles, es uno de los monumentos falleros que no se pudo "desplantar" cuando se declaró la pandemia de la covid-19 en marzo del año pasado.

"Se tenía que quemar controlada por el Ayuntamiento, pero el día de antes en un acto vandálico nos la quemaron y el artista ha tenido que rehacer la pieza central, que era lo que estaba puesta durante la pandemia", ha señalado Hércules.

La falla Reino de València-Duque de Calabria, ubicada en el barrio de Ruzafa, lleva por lema "Malamente" y habla de cómo "el mal habita en el mundo y nos hace ser más malos" y el antídoto es la "esperanza". Tiene como figura central a Lucrecia Borja, hija del Papa Alejandro VI, considerada "malvada", cuando "los malos eran otros".