Ramón PuchadesAcabamos de cruzar el ecuador de una legislatura marcada por la pandemia, ¿cómo ha sido gestionar un municipio como Almàssera en esta coyuntura?
La pandemia lo ha condicionado todo. Hemos tenido que dejar aparcados proyectos, propuestas y trabajo para estudiar día a día qué medidas, decisiones y acciones emprender para dar respuesta a la emergencia sanitaria, mantener los servicios básicos, especialmente servicios sociales, y ayudar a paliar los problemas económicos del pequeño comercio.
Desde su experiencia en el ámbito político, ¿diría que han sido los momentos más complicados que le ha tocado vivir como cargo público?
Si, ya que no existía ninguna hoja de ruta. Tuvimos que tomar decisiones que jamás se habían llevado a cabo, sin tener ejemplos o experiencia previa.
¿Cómo recuerda los primeros compases del estado de alarma?
Trabajando los siete días de la semana, y las 24 horas del día. Tomando decisiones diarias para garantizar que nuestro Ayuntamiento no se paralizase.
¿Considera que se actuó con agilidad a la hora de coordinar todos los servicios necesarios?
Sí. La realidad es que todo funcionó, pero implementando nuevas medidas, por ejemplo la atención y el trabajo telemático, pero garantizando que todos los trabajos se realizaran.
Ante algo tan desconocido, ¿hubo que improvisar mucho?
Improvisar no es la palabra adecuada. Más bien ha sido tomar decisiones constantemente sin una experiencia previa, sin tener datos de cómo iban a funcionar. Medidas que no se habían puesto en marcha nunca. Afortunadamente podemos decir que el Ayuntamiento funcionó con el esfuerzo de toda la plantilla.
¿Mucha gente a la que agradecer su colaboración en este año?
Ya lo creo. A todas y todos los trabajadores del Ayuntamiento, tanto a los que se decretaron servicios esenciales y vinieron todos los días como los que desde sus casas teletrabajaban. A nuestros comercios que fueron capaces de abastecer a la demanda de toda la población, a nuestros agricultores que nos ayudaron desinteresadamente a desinfectar junto con nuestros jardineros todas las calles de nuestro pueblo. A la Policía local y a Protección civil, que trabajaron sin descanso. Y a toda la población, ya que se quedaron en sus casas y han cumplido todas las normas que se decretaron. Ha habido una colaboración muy grande por parte de mucha gente con la que siempre estaremos agradecidos.
¿La crisis sanitaria ha puesto de relieve nuevas necesidades en el municipio?
Ha confirmado que todos los servicios que se prestan son necesarios, y que un sociedad moderna, avanzada y igualitaria tiene que tener una administración potente y con recursos para que nadie se quede sin atender en una situación de crisis.
¿Ha sido fundamental la comunicación con la ciudadanía? ¿Cómo se ha hecho?
Gracias a poner en marcha de nuevo la megafonía en el pueblo nos comunicamos como se ha hecho tradicionalmente por los bandos. También haciendo uso de las nuevas tecnologías a través del bando por teléfono, así como la página web y las redes sociales.
¿Qué medidas se han adoptado para ayudar a los sectores más perjudicados por las restricciones?
Una de las primeras medidas fue la de incrementar los fondos destinados a Servicios Sociales, aumentando en un 50% la partida de ayudas de emergencia, ayudas de alimentos y productos sanitarios, de higiene y primera necesidad. Se suspendieron tasas municipales como la de terrazas y mercados, que seguirán suspendidas hasta el 31 de diciembre de este año. También devolvimos la parte proporcional de aquellos impuestos por servicios que no se llegaron a prestar. Sacamos una primera línea de ayudas de apoyo a comercio, pymes y microempresas por valor de 150.000€ y aumentamos la subvención a la Asociación de Empresarios y Comerciantes. También a las destinadas a fallas, para paliar la súbita suspensión de la fiesta. Más tarde nos hemos ido sumando a las diferentes iniciativas de la Diputación de Valencia y de la Generalitat Valenciana, como el Plan de Empleo ECOVID, por el cual se contrató a 8 personas destinando más de 80.000€, o el Plan Resistir, por el cual se ponen a disposición del tejido económico algo más de 149.000€. Todo esto ha sido posible gracias a modificaciones de crédito, a las ayudas destinadas por parte de la Diputación y de la Generalitat y de remanentes de tesorería. También hay que tener en cuenta las inversiones en material sanitario, servicio de limpieza, etc.
¿La hoja de ruta en cuanto a inversiones sigue según lo previsto?
A pesar de la pandemia, hemos ido aumentando las inversiones como veníamos haciendo. En 2020 conseguimos cancelar la deuda que arrastrábamos de 7,3 millones de euros desde el año 2015, lo cual nos ha permitido incluir inversiones de 300,000€ en nuestros presupuestos, y ahora acabamos de aprobar 566.000 € de remanentes que también vamos a invertir en nuestro pueblo. A todo ello hay que añadir la ampliación del Fondo de Cooperación Municipal y el Plan de Inversiones, ambos de la Diputación de Valencia.
¿Cuáles van a ser esas inversiones prioritarias para lo que resta de legislatura?
Todas estas inversiones van destinadas a mejorar las instalaciones municipales, como el polideportivo, mejorar el estado de parques y jardines, y a proyectos de reasfaltado y accesibilidad urbana. También tenemos proyectos clave, como es la instalación de una carpa en la pista de Hockey, la construcción de un nuevo bar y un graderío en el polideportivo, la construcción de un edificio polivalente en el Museu de l'Horta o la reforma de la cocina del bar de la Llar dels Jubilats.
¿Ha sido vital para las entidades locales el hecho de que se les haya permitido usar el remanente del presupuesto para inversiones?
Sí, claro. Inicialmente nos han permitido poder dotar de mayor cuantía la partida de servicios sociales, y después realizar inversiones en nuestro pueblo, que generan empleo que tanta falta hace en estos momentos de crisis.
¿Cuál es la situación de la pandemia en estos momentos en la localidad?
No es para estar contentos. Estamos entre los 32 primeros pueblos donde se ha tenido que volver al toque de queda. Desgraciadamente tenemos un porcentaje muy elevado, lo cual nos recuerda que todavía estamos en pandemia y que no podemos relajarnos ni olvidar que hay que continuar con las medidas y la precaución.
¿Se han podido abrir todos los servicios de esta época del año?
Hemos abierto la piscina de verano igual que lo hicimos el año pasado con todas la medidas. Este año hemos podido dar el servicio de la Escola d'Estiu. También hemos ido realizando todos los programas culturales, educativos y sociales siguiendo las restricciones y las precauciones necesarias. Pero tenemos que continuar con algunas limitaciones, como la atención con cita previa, la suspensión de actividades festivas o otros aspectos.
¿Han tomado alguna decisión sobre las fiestas, las fallas y los actos más multitudinarios?
Sobre los actos multitudinarios estamos sujetos a las órdenes y decretos de la Generalitat Valenciana, y no se van a poder realizar actos como procesiones, cenas o actos multitudinarios como los conocíamos en el mes de agosto. En cuanto a las fallas, nuestra Junta Fallera Local no ha valorado plantar monumentos en septiembre ni realizar los actos falleros tradicionales.
