Vista general de una terraza prácticamente completa.
El alcalde de València, Joan Ribó, ha anunciado que se va a suspender para todo el 2021 la tasa de terraza para la hostelería y que tampoco tendrán que abonar la tasa de ocupación de la vía pública los vendedores de los mercadillos, los quioscos y las actividades culturales que transcurren al aire libre.
Estas tasas municipales suponen 2'6 millones de recaudación en el caso de las terrazas de la hostelería en la ciudad, otros 350.000 euros en el caso de los mercadillos, 45.000 euros en cuanto a los quioscos, y 40.000 por el resto de actividades previstas, según ha informado el Consistorio.
"En total, estamos tramitando una nueva ayuda indirecta superior a los 3 millones de euros para estos sectores económicos, del que forman parte autónomos y pequeñas y medianas empresas", ha dicho Ribó, que ha destacado que son "justamente aquellos más afectados por la crisis económica derivada de la pandemia".
El Ayuntamiento ya aprobó esta medida para el inicio del año, pero con la decisión tomada ahora, que se aprobará finalmente en la próxima Comisión de Hacienda, se dará continuidad hasta alcanzar todo el 2021.
"Las ayudas que ofrece València a autónomos y PYMES, como son los más de 20 millones del Pla Resistir, o estas nuevas ayudas indirectas de más de 3 millones tienen un objetivo claro: intentar evitar la destrucción del tejido productivo y empresarial valenciano en aquellos sectores más afectados, e intentar mantener los puestos de trabajo que dependen de él", ha indicado.
Ribó ha recordado que "fue un acuerdo entre el gobierno municipal y la oposición en el marco de la reconstrucción de València, destinar ayudas directas extraordinarias a los sectores económicos que peor lo han pasado, así como suspender o modular las tasas municipales para que pudieran tener un margen de flexibilidad en sus economías. Con esta acción, continuamos con esta línea".
