Avanzamos por la misma senda que hemos seguido estos cuatro años: trabajo, trabajo y más trabajo. Hemos aportado decenas de propuestas, pactos con la izquierda y la derecha, y siempre desde el punto de vista del interés general. Lo hemos demostrado desde el convencimiento, el afán de servicio, la cercanía a la ciudadanía, que nos ha transmitido todas sus necesidades. Hemos hecho una oposición completamente distinta a lo de siempre porque el ayuntamiento necesita equilibrio ideológico y de gestión, y acabar con los intereses personalistas de cada partido que gobierne. Por eso, nuestra dirección es la paz social y política. No podemos estar con la crispación política constante. Para conseguirlo, me presento a la alcaldía con el orgullo de ser hijo y nieto de saguntinos y con la experiencia de conocer muy bien nuestra ciudad. La que, por cierto, tiene un potencial enorme para mejorar la vida de todos los saguntinos y saguntinas.
Mi objetivo es aprovechar al máximo todo lo que nos está pasando. Se nos abre un abanico de oportunidades para impulsar el bienestar de la ciudadanía y para lograrlo lo primero es hacer unos presupuestos realistas y realizables. Hay que marcar una hoja de ruta de proyectos concretos, que sean factibles. Por el contrario, ahora no hay una previsión de lo que se nos viene encima con la gigafactoría, no hay previsión de todas las necesidades que tendremos en sanidad, colegios, servicios, de mantenimiento, viviendas de alquiler… Por otro lado, tenemos que potenciar, con un proyecto real y ambicioso, el turismo de nuestras playas y montes, tan abandonados actualmente. Se necesita otro talante para gobernar, lejos de los egoísmos personales y a favor de Sagunto.
Las misma que hace tres legislaturas. Año tras año vemos cómo se cae nuestro rico patrimonio. Esto no se puede consentir. Sobre la limpieza y el mantenimiento de la ciudad, afortunadamente, después de 15 años de inacción y dejadez del servicio de la SAG, gracias a CS, hemos podido empezar a cambiar el rumbo. Es cierto que queda mucho por mejorar porque esta gestión es muy complicada y costosa. La SAG estaba en la UVI, vamos a confiar en la nueva dirección y en el plazo de dos años podremos ver la mejoría tan necesaria.
La gestión del tripartito es la del reparto, muy fácil de explicar. Hay una tarta a repartir, que son los presupuestos, y el criterio que se le viene aplicando es el de siempre. Cada partido quiere la cucharada más grande que nadie, sin importarle si las necesidades son reales o no. Así, con ese criterio no hay un reparto en base a las necesidades y deficiencias de nuestro pueblo. Con 14 concejales en gobierno, más todos los liberados que tienen, sigue quedando de manifiesto que no trabajan lo suficiente, los resultados no se reflejan a pesar de tener tanto personal, y de gobernar aquí, en la Generalitat, en Diputación y en el Gobierno de España. No tienen peso ni músculo. Hay que ser más ágiles y efectivos.
Así es, efectivamente no habrá mayorías. Nosotros vamos a estar esta vez, seguro. Soy persona de retos toda mi vida, paso a paso los consigo, y este lo será. Tenemos una ventaja muy importante sobre el resto de partidos políticos: podemos pactar y gestionar con la derecha y con la izquierda. Pero lo más importante, somos los únicos que podemos dar el tan necesitado equilibrio a la gestión y a la política. Por tanto, desde esta premisa, que no lo duden nuestros ciudadanos, gobernará con nosotros quien se comprometa a llevar un programa realizable y real.
En esta legislatura obtuvimos dos concejales. Partiendo de esta base, del trabajo realizado, del acercamiento y trato personal con mis vecinos, la visibilidad que he tenido por el afán de servicio, que soy de aquí y muy conocido, mi reto es superar lo anterior y obtener un mínimo de tres concejales. Con este resultado a gobernar y la ciudad ganará.
Es cierto que una cierta experiencia me avala y me ha hecho crecer en valores. Desde mi dedicación, ilusión, esfuerzo y amor por lo que hago, no sólo hemos hecho una oposición constructiva, sino que, además, hemos apoyado al gobierno más que nadie. Por nuestro talante, por sentido común y porque nuestra prioridad es la ciudadanía. Me lo creo y lo hemos puesto en práctica. Somos distintos, somos necesarios. Representamos y trabajamos por el equilibrio, el centro liberal y la paz política.
Apruebo la instalación porque es progreso y la gente necesita trabajar, pero denuncio la gestión llevada por el tripartito. Por una parte, una vez más, se ha puesto en evidencia el talante y los desacuerdos en tripartito. Con sus manifestaciones y criterios tan dispares y lejos de la realidad, me recuerda en momentos al ejército Pancho Villa. Compromís e Esquerra Unida, poniendo obstáculos en el proyecto con el "no a todo", como siempre hacen, complicándolo todo; pero a su vez pegándose codazos con el PSOE para hacerse la foto, a ver quién ha hecho más o menos. Por otra parte, algo que me entristece mucho, que afecta a una parte muy importante de este proyecto, los propietarios. Esos agricultores a los que solo Salva Montesinos y CS está defendiendo para que no los expolien. El tripartito aquí y en la Generalitat les ha dado la espalda. Y que no nos cuenten milongas sobre la llegada de la gigafactoría, esto es una decisión empresarial por las virtudes que tiene esta ubicación.
Pincha aquí: Información publicada en la edición en papel del Camp de Morvedre
