La candidata socialista al Ayuntamiento de València, Sandra Gómez, ha pedido este domingo a las personas progresistas y demócratas que el 26 de mayo no se queden en casa, porque está en juego que esta ciudad "la dirija el fanatismo o la convivencia" y que la extrema derecha "decida el rumbo" de València.
Gómez se ha pronunciado así durante el acto de su proclamación como candidata, en el que participa el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y que se celebra en el Polideportivo del Cabanyal, un barrio trabajador que, según ha dicho, va a simbolizar "el principio de un movimiento que sale a ganar el futuro".
La portavoz socialista en el Ayuntamiento de València ha señalado que son miles los valencianos que van a decir "sí a la libertad, sí a la igualdad, sí a una València moderna y diversa", y no van a permitir que "nadie limite" su futuro.
Gómez ha incidido en que, si hace cuatro años los socialistas se movilizaron para expulsar la corrupción, el próximo mes de mayo València "no solo va a dejar fuera a los corruptos, también va a frenar al fanatismo", y ha hecho hincapié en que "estas no son unas elecciones más".
Ha asegurado que siempre querrá sumar mayorías de gobierno con las fuerzas progresistas, si bien el "pacto fundamental" cuando ganen las próximas elecciones será "con València", y ha anunciado que lo primero que hará entonces será convocar una gran mesa social para pactar entre todos las cuestiones más importantes de la ciudad.
La candidata ha apelado de construir València "recuperando el dialogo y el consenso", porque las políticas "no se imponen, se acuerdan" y porque "la mejor forma de hacer oposición no es desenterrando fantasmas y guerras identitarias del pasado", sino "haciendo que la discrepancia sirva mejorar la vida de la gente".
Ha reprochado al PP que diga que va a ganar València para ese partido, y se ha preguntado si van a recuperar la ciudad "para el PP del caso Taula que tiene a diez de los 10 diez concejales imputados" o para "los que no tienen ningún problema en pactar" con "la ultraderecha fanática e intolerante que quiere llenar de odio" la ciudad.
"Ellos saquearon València y nosotros le prometemos València a las valencianas y valencianos", ha señalado Gómez, quien para quien está en juego que la ciudad "la domine el odio o la alegría, el machismo o la igualdad, la intolerancia o la libertad".
Ha tenido palabras de recuerdo para Carmen Alborch, símbolo de la València "moderna y abierta", y ha alertado de que "la derecha populista no cabe en la ciudad que hizo suyas el último alegato de Carmen para que el feminismo sea Patrimonio de toda la humanidad", y de que el camino hacia la igualdad no tiene "vuelta atrás".
En este punto, ha anunciado que cuando sea alcaldesa las políticas de igualdad dependerán exclusivamente de Alcaldía, y ha reivindicado que, en los momentos más decisivos, "la izquierda que se centra en lo importante".
Finalmente, ha asegurado que su proyecto "no es el proyecto del PSOE", sino el de cualquier valenciano que crea en el progreso de su ciudad, en la libertad de sus ciudadanos y la solidaridad con sus vecinos.
La secretaria general del PSPV de la provincia de Valencia, Mercedes Caballero, ha reivindicado que los socialistas "han devuelto a la gente el orgullo de ser valenciano" y ha reclamado que estos cuatro años de gobiernos progresistas "no pueden ser un paréntesis entre gobiernos de la derecha".
HACIA ADELANTE O ATRÁS
El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha alertado este domingo que, en las elecciones del próximo mes de mayo, se elige entre "o ir hacia adelante o hacia atrás", y ha indicado que en la Comunitat Valenciana "no pueden engañar", porque "hace muy poquito" que ha gobernado la derecha.
Durante su intervención en la proclamación de Sandra Gómez como candidata socialista a la alcaldía de València, Puig ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presente en el acto, que ayude a resolver un problema que conoce y que "más pronto que tarde" se conseguirá, y es una financiación justa para la Comunitat.
Puig ha lamentado que en estos momentos vuelvan a "cabalgar los jinetes del racismo y la xenofobia" por Europa y también en España, y ha aseverado que los socialistas no van a mirar "hacia otro lado ante cualquier provocación de la extrema derecha ni de las derechas que apoyan a la extrema derecha", porque está en juego la paz.
Ante unas 2.500 personas que llenaban el Polideportivo del Cabanyal, el también president de la Generalitat ha recordado que se cumplen 74 años de la entrada de las tropas aliadas en Auschwitz y ha reivindicado que "la memoria es esencial, pero no para mirar atrás con ira", sino para trabajar desde la cohesión y la convivencia.
Puig ha asegurado que, si hay un proyecto "para todas y para todos" es el del PSOE, donde "no hay exclusiones, no hay partidismos, no hay sectarismo, no hay fanatismo" sino que busca sumar para avanzar, en contraste con los que quieren fracturar.
Además, ha alertado de que los socialistas tampoco están por ningún proyecto "recentralizador", como quieren los que se "apelotonan" en el "carril" de la "inmoderación y del radicalismo".
Puig ha defendido que quienes van a frenar a las derechas van a ser las mujeres, a las que ha dicho: ha sido un "craso error intentar confrontar con vosotras, lo van a pagar en las urnas y en la sociedad; no vamos a dar un paso atrás, ni las mujeres ni los hombres que queremos a las mujeres".
Ha indicado que el PP de la Comunitat Valenciana, y su presidenta, Isabel Bonig, "abusa" de la paciencia de los socialistas cuando va a Fitur a criticar, cuando la última consellera de turismo del PP "está en la cárcel por Fitur", y ha considerado que "esta señora es la extrema extrema inmoderación".
También ha dedicado palabras al aspirante de Ciudadanos a ser candidato a la presidencia de la Generalitat, Toni Cantó, al que ha acusado de vivir "alejado de la realidad" valenciana y de ser "obscenamente mentiroso" en sus afirmaciones cuando viene algún fin de semana, porque se puede criticar, pero no "alterar" la realidad.
Puig ha aseverado que el objetivo para la próxima legislatura es el pleno empleo, y ha destacado la necesidad de avanzar y de que este sea "el momento de los valencianos y valencianas".
El dirigente socialista ha agradecido a Sánchez que vuelva a estar en València y siempre al lado de los valencianos y que sea un hombre que cumple la palabra dada e interpreta adecuadamente lo que necesitan los valencianos.
Ha reivindicado la alianza que existe entre la Generalitat, el Gobierno de España y los Ayuntamientos progresistas, un "alineamiento positivo" en el que hay que dar "un paso adelante" para poder conseguir una financiación justa y superar "las hipotecas del pasado".
Puig ha destacado también la importancia de las elecciones europeas, en las que no hay que "bajar los brazos" sino combatir desde el progresismo para "acabar con la política de los ajustes" que ha llevado a "tanta fractura y desafección, y volver a la Europea del crecimiento y la justicia social".
Ha hecho una defensa de los cítricos valencianos, en los años 60 suponían el 25 % de las divisas de España, y ha señalado que no quieren proteccionismo, sino competir, pero en igualdad de condiciones, y que el sector no tiene que "aguantar una reciprocidad que no existe".