En primer lugar debo aclarar que no le negué el poder contrastar la información recibida por la sra. alcaldesa y el sr. Picón que a El Periódico de AquÃ. Simplemente El Periódico de Aquà llamo al número que tenÃa para mi contacto, no cayó que era el número corporativo que disponÃa del ayuntamiento y que devolvà el pasado lunes cuando entregué mi renuncia, hecho que si conocÃa la Sra. Alcaldesa. Asà que no era posible que yo atendiese a sus llamadas.
Dicho esto, es falso que se orquestara una moción de censura contra Maria Asensi. Maite Pérez puede corroborar mis afirmaciones. Quizás haya sido posible que a la sra alcaldesa le haya traicionado el subconsciente y me haya atribuido acciones que ella hubiese llevado a cabo estando en mi lugar.
MarÃa Asensi, afirma que me ha defendido en varias ocasiones, pero sin embargo fui yo la que la salvó de la intención de moción de censura por parte de AEVA23 y de Silvia Casas.
No es sembrar discordia escuchar las quejas de los vecinos que han venido a hablar conmigo sobre su malestar ante el comportamiento que lleva meses teniendo la sra. alcaldesa y obrar en consecuencia.
Esto no ha sido fruto de una mera rabieta, ha sido una decisión meditada durante más de un mes. De hecho me hubiese ido antes de no ser porque tenÃa que dejar unas actividades realizadas para que no haya problemas con su justificación y además asà me lo pidieron técnicos del ayuntamiento.
No me he metido en las competencias de Carlos Picón, simplemente Turismo, Cultura y Patrimonio iban más unidas de lo que a ambos nos hubiese gustado.
Si que es verdad que he gestionado la cartera de cultura sin tenerla oficialmente, asà me lo pidió la Sra. alcaldesa y el Sr. Picón manifestó que no querÃa gestionarla. Pese que yo ya tenia mucha faena, la acepte y la he gestionado para que mis vecinos no se quedaran sin actividades culturales en este 2024.
También he gestionado el Plan Municipal de Gestión Ética de Colonias felinas, he acudido a las charlas de sanidad sobre mosquito tigre y vectores sobre la fiebre del Nilo. He intentado montar un voluntariado para limpiar el barranco y pese que no eran mis competencias nadie se ha quejado.
Cuando decidà asumir las competencias de mujer e igualdad y gestioné los puntos violetas tampoco recibà queja alguna.
Cuando participé en actos que no eran mÃos para ayudar porque el concejal de turno no tenÃa la suficiente disponibilidad tampoco me lo reprochó nadie.
Cuando he firmado Fe de vidas o gestionado llamadas telefónicas que no eran mÃas porque la sra. alcaldesa se hacia largos almuerzos en el bar... tampoco se quejó nadie.
Es falso lo que afirma Carlos Picón sobre que haya perjudicado subvenciones. Al contrario, he gestionado todas las que han caÃdo en mis manos o me ha pedido la sra. Alcaldesa. También informo a este medio de comunicación que un concejal no puede ejecutar nada sin la firma prevÃa de la sra. alcaldesa.
En cuanto al tema de difusión de falacias, no soy yo la que las ha difundido. Mi trabajo habla por si mismo y no necesito hacerlo. ¿PodrÃa decir lo mismo quién me acusa?.
He sido tachada de egoÃsta y soberbia, cosa que discrepo porque no creo que una persona egoÃsta renuncie a una retribución mensual con la que pagar la hipoteca para ir a ejercer oposición y no seguir cobrando. Es mi sentido de justicia lo que me ha llevado a tomar esta decisión.
En cuanto a ser soberbia no creo que una persona de esas caracterÃsticas pierda su tiempo en realizar cursos de formación para aprender a gestionar sus competencias. En lo que llevo en el gobierno he completado siete. ¿ Cuantos realizó usted, señora alcaldesa? Y de esos, ¿Cuántos terminó?
Si soy culpable de algo es de haberme involucrado al 100% es mis labores en el ayuntamiento.
La verdad, es que siento mucho a la situación que se ha llegado, pero si tanto la sra. alcaldesa como el equipo de gobierno, hubiese utilizado el tiempo que ha empleado en criticar y difamar, en trabajar con diligencia, les aseguro que no hubiésemos llegado a este punto.