El Juzgado de Instrucción número 6 de València investiga a la exdirigente de Vox Cristina Seguà por la publicación de un vÃdeo sobre las dos menores que denunciaron una violación grupal en la localidad valenciana de Burjassot.
La violación grupal de la que fueron vÃctimas dos niñas se habrÃa cometido el pasado 16 de mayo y se detuvo a siete menores de entre 15 y 17 años y a un joven de 18 por su supuesta relación con las agresiones sexuales, aunque todos ellos quedaron en libertad vigilada.
Ese mismo mes de mayo, la sección de delitos de Odio, dirigida por la fiscal Susana Gisbert, inició las diligencias de investigación penal contra Seguà por este asunto.
La investigación penal de la FiscalÃa se sumó a la denuncia de la asociación de consumidores Facua ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) por la difusión del vÃdeo tanto en su cuenta de Twitter como en la de Telegram, en los que era posible identificar a las menores.
En el vÃdeo aparecen las dos menores y otra niña amiga de ambas, también menor, en un directo en Instagram que fue grabado por el entorno de los presuntos violadores y difundido.
En esa grabación, las menores comentaban que su caso habÃa salido en televisión, que probablemente habrÃa un juicio y que una de ellas seguramente serÃa citada como testigo.
Facua, según ha informado este viernes, aportó a la FiscalÃa certificados digitales de los mensajes publicados por la denunciada en Twitter y Telegram.
La FiscalÃa de Valencia considera que los hechos podrÃan ser constitutivos de un delito contra la intimidad, tipificado en los artÃculos 197 y siguientes del Código Penal, y/o un delito de odio, recogido en el artÃculo 510.1.
Según Facua, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) requirió a Seguà que borrase los mensajes en los que habÃa insertado el vÃdeo, donde se mencionaba el nombre de una de las menores y el primer apellido de otra, aparecÃa el nombre de usuario en Instagram de una de las vÃctimas y, durante un momento, podÃan verse las caras de dos de las niñas que conversaban.
"Aunque la denunciada borró varios de los mensajes, volvió a publicar otra versión del vÃdeo, esta vez con las imágenes pixeladas, lo que en cualquier caso no impedÃa que las menores pudiesen ser reconocidas por el resto de datos personales que aparecÃan en él", señala esta organización de consumidores. EFE