Imagen compartida por el Valencia Basket con motivo de la entrega.El base belga Sam Van Rossom, que ha dejado el Valencia Basket tras diez años en la entidad, ha hecho entrega al club de la camiseta con la que jugó su último partido y que ya se puede ver en el museo de camisetas históricas de la entidad en L'Alqueria del Basket, que en el futuro formará parte del museo general en el Roig Arena.
Van Rossom, que no ha podido jugar en los últimos meses por una lesión en la rodilla, disputó su último partido con el Valencia el pasado 22 de noviembre. Fue contra el Real Madrid en la Fonteta y en la Euroliga y pese a los 17 puntos que le convirtieron en el máximo anotador del encuentro no pudo evitar la derrota por 73-80.
El belga se mostró especialmente satisfecho porque la camiseta vaya a estar a la vista de todos los niños y niñas que acudan a entrenar a L'Alqueria. "Es un honor muy grande y me llena de ilusión. Cuando yo era un niño siempre me fijaba mucho en los jugadores del primer equipo de donde estaba jugando yo. Eran mis ídolos, me fijaba en ellos para copiar su juego y siendo aquí significa todavía más", apuntó.
"Este es un club que tiene una cantera muy grande, muchos niños vienen aquí a entrenar en unas instalaciones que son una de las mejores de Europa. Ellos vienen con ilusión y si puedo ayudarles a transmitirles los valores que he tenido durante mi carrera o que se fijen en mí, en el juego o lo que sea, es un honor muy grande poder estar aquí", añadió.
La 'taronja' del pasado 22 de noviembre no es la única camiseta de Van Rossom en esa vitrina porque ya estaba la conmemorativa que lució en el partido mil del club en la Liga Endesa en la campaña 2015-16 y que llevaba los colores blanco y rojo con los que el club se estrenó en la máxima categoría.
La entidad confirmó la semana pasada que cuando Van Rossom se retire como jugador profesional retirará el número 9 que ha lucido en la mayoría de campañas en el club y también que dará su nombre a una de las pistas de L'Alqueria.
