"La violencia de género es una manifestación extrema de la desigualdad y discriminación de la mujer"

El secretario autonómico de Familia y Solidaridad, Enrique Navarro, ha afirmado hoy que “la violencia de género es una de las manifestaciones más extremas de la desigualdad y la discriminación que sufren las mujeres”.

Navarro, que esta tarde ha pronunciado una conferencia sobre La mujer y los derechos humanos: Un problema de igualdad, dentro de las V Jornadas de Escritores Pro derechos Humanos, organizadas por el Ateneo Blasco Ibáñez y la Facultad de Derecho de la Universitat de València, ha asegurado que la violencia contra las mujeres es “la vulneración más extendida de sus derechos humanos y constituye un obstáculo para alcanzar una sociedad más justa y tolerante”.

El secretario autonómico ha recordado que, “pese a las numerosas medidas de todo tipo impulsadas por todos los gobiernos de uno y otro color, la realidad es tozuda y las mujeres siguen siendo asesinadas, ante la impotencia de una gran parte de la sociedad”.

En palabras del secretario autonómico, “la igualdad de género es un derecho irrenunciable y una condición indispensable para el desarrollo y la reducción de la pobreza”.

“Cada mujer violentada es una manifestación de la barbarie humana que adopta formas muy diversas: violaciones, trata de mujeres y niñas, prostitución forzada, esclavitud sexual, selección prenatal del sexo del feto en favor de bebés masculinos, mutilación genital femenina y otras prácticas y tradiciones aberrantes en las culturas de terceros países”, ha añadido Navarro.

La mejor herramienta: la educación

Enrique Navarro ha planteado que la mejor forma de combatir estas manifestaciones de barbarie es desde la educación. “Las mujeres tienen derecho a ser valoradas y educadas sin estereotipos de conductas y prácticas basadas en conceptos de inferioridad y subordinación entre los sexos”, ha dicho, para añadir que “tienen derecho a contribuir al desarrollo y el bienestar de la sociedad y a participar en igualdad de condiciones que los hombres en la vida política económica, social y cultural, disfrutando de los derechos humanos universales”.

A su modo de ver, “tenemos la necesidad prioritaria de educar a los hombres, tanto niños como adultos, y alentarlos a combatir las actitudes negativas contra mujeres y niñas”, toda vez que la violencia de género se está infantilizando y mujeres cada vez más jóvenes sufren maltrato, al tiempo que hay agresores cada vez más jóvenes.

“Los derechos humanos son para todos”, ha recordado Navarro, que ha concluido su intervención afirmando que “la energía, el talento y la fuerza de las mujeres y las niñas son el recurso natural no aprovechado más valioso de la humanidad”.