Sergio Muniesa. / EPDA Cuando enfilamos la recta final de la legislatura, y después de casi ocho años de tripartito, con los últimos tres presididos por el socialista Darío Moreno, poca esperanza de cambio podemos tener.
Comprobamos después de tres años, nuevamente sus promesas incumplidas y, sacando cuentas, vemos que después de todo este tiempo, las cosas lejos de solucionarse, han empeorado, lo que denota lo negativo de su gobierno.
Tres años y medio después, la sucesión de excusas como lo de ser nuevo sin serlo, de principio de legislatura, ha dejado patente la realidad del más de un más de lo mismo. Sin inversiones, con las cuentas en números rojos, en definitiva, sin la soluciones a las cuestiones más básicas del día a día.
Hace un año se comprometieron una vez más a solucionar los problemas que reivindican los vecinos, 365 días después, con darse un paseo por cualquier barrio de la ciudad, topamos de nuevo con los mismos problemas: suciedad, baches, …
De qué sirve hacerse publicidad con el alcalde de barrio si, pasados los meses las reivindicaciones siguen pendientes. Ya no convencen a los vecinos pero Darío Moreno y su tripartito venden lo mismo en 2022 que en 2021 y muestran su satisfacción cuando no han ejecutado ni entregado nada.
La sucesión de excusas, hoy, ya no tienen cabida y sobra echar mano de los pretextos en un año lleno de sombras en la gestión del gobierno del socialista Darío Moreno y su tripartito.
El tripartito no puede justificarse en el entorno para no resolver los problemas. Esa es su responsabilidad. Por eso un año más vemos que los problemas siguen ahí, sin resolverse. Las prioridades de este gobierno han sido otras y ahora no hay inversión o mantenimiento que, por grande o pequeño que sea, no haya sufrido retrasos o simplemente siga sin materializarse y por ello la principal queja de la ciudadanía es una falta general de mantenimiento en la ciudad.
La pasada legislatura ya pasó esto y se excusaron con que éste iba a ser el de la confirmación, pero a Psoe, Compromis y Eu les da igual que pasen 4 más, 8 ó 12 porque no serían suficientes.
Por eso, ante la falta de resultados anuncian abrir una nave, como un contenedor, en vez de un museo industrial o siguen con el horno alto cerrado después de 8 años reflejo de su incapacidad, al igual que con el resto de nuestro patrimonio local, o se exigen remunicipalizar el servicio de ayuda a domicilio y vuelven a prorrogar su gestión privada por segunda vez, o la falta de funcionamiento de la SAG y la suciedad inunda calles, son ejemplos de su insolvencia que no se disimula, ni asumiendo el pago de proyectos que debieran realizar la administración autonómica o del estado donde gobiernan los suyos y que nos ningunean presupuesto tras presupuesto.
Pretenden ocultar todo esto apelando a la decisión de invertir de una empresa privada como Volkswagen con el anuncio de la giga factoría, no cambia la capacidad de gestión de un gobierno mediocre y Darío Moreno sabe que su imagen y credibilidad se ha roto en determinados círculos, porque no hay resultados.
Salir bien en la foto, no gestiona y, en la recta final de la legislatura, los resultados son nulos. Los datos no mienten y la consecuencia de casi 8 años de tripartito son la falta de resultados.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia