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Blanca Rosa Pastor "Mi preocupación tras el incendio son los ganaderos y apicultores locales"
Actualmente están en un limbo, no han recibido ayudas todavía y no tienen para que coman los animales
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REDACCIÓN - 26/10/2022
la alcaldesa de Alcublas,Blanca Rosa Pastor, con Jesús Molina, vicepresidente del Grupo EPDA / EPDA
Miguel Gimeno, apicultor de Alcublas / EPDA
Alcublas fue uno de los municipios afectados en el incendio de Alto Palancia que tuvo lugar el pasado agosto. El término municipal de esta comarca de La Serranía consta de 6.000 hectáreas de las cuales 650 hectáreas, correspondientes a monte y cultivos, fueron afectadas durante este devastador incendio.
Su alcaldesa, Blanca Rosa Pastor, afirma que en ese momento “había mucha preocupación sobre todo por el recuerdo del incendio que ya sufrió la localidad en 2012, ello hizo que todo se viviera con más sufrimiento", sin embargo, la gestión entre aquel incendio y el de este año 2022 ha sido muy diferente: “En aquella ocasión únicamente vinieron dos helicópteros a cargar agua, dejaron que el pueblo se quemara. En esta ocasión la situación ha sido muy diferente puesto que, aunque el incendio fue peor en Bejís, Torás, El Toro o Andilla, aquí pasaron continuamente medios aéreos y medios terrestres. Además, como los pueblos afectados estaban tan rodeados por el fuego y no podían acceder a hidrantes, la localidad de Alcublas estuvo sirviendo y facilitando la carga de cubas de agua", asegura la alcaldesa.
En el incendio del pasado verano la localidad de Alcublas no sufrió un peligro real y fueron de los municipios menos afectados en comparación con Bejís o Teresa, sin embargo, Blanca Rosa afirma que “Lo que más preocupaba a la población en esos momentos era el humo y, de hecho, tuvimos que confinarnos durante varias horas hasta que la dirección del viento cambió y permitió que los vecinos salieran de sus casas”.
Entre las localidades afectadas, también se encuentra Sacañet, cuyos vecinos fueron trasladados a Alcublas donde primero fueron acomodados en el Polideportivo y posteriormente fueron trasladados a la Casa de la Cultura. "Les cuidamos lo mejor que pudimos y la verdad es que la gente se volcó totalmente con ellos, los bares ofrecían comida, los vecinos mantas...les ayudamos en todo lo que necesitaron", aseguraba la alcaldesa. Además, cabe destacar que, en este periodo, Alcublas incrementó triplemente su población debido al período estival y a la celebración de las fiestas mayores de la localidad, por lo que la ayuda también se vio reforzada.
La apicultura y la ganadería local, los grandes afectados
El verdadero problema en Alcublas viene ahora puesto que muchas de las zonas de floración, utilizadas para alimentar a los animales, se han quemado y, por ello, existe una gran preocupación por parte de los ganaderos y apicultores locales.
Los ganaderos locales se enfrentan a una realidad en la que se encuentran poco respaldados por parte de las administraciones públicas debido a la escasez de ayudas unido a su preocupación por la falta de alimento que van a tener los animales en los próximos meses.
Uno de los 3 ganaderos de la localidad de Alcublas posee un ganado de 1000 cabezas y sufrió de primera mano el incendio: “cuando se originó el fuego corríamos el riesgo de que cambiaran los vientos y tuvimos que salir corriendo con todos los animales hasta el término de Villar del Arzobispo, donde llegaron un total de 165 animales a buen término, que no son pocos. Ahora estamos haciendo acopio de productos porque todos los pastos que utilizamos durante el invierno en Sacañet y Bejís se nos han quemado. Todas las semanas miro el BOE pero no sale ninguna clase de ayuda ”.
Aunque las ayudas no están previstas, la alcaldesa asegura que le consta que “la Dirección General de Medioambiente lo tiene en sus anotaciones y lo está estudiando” pero, tras los incendios sufridos en 1995, en 2012 y este 2022, los ganaderos dudan de que están ayudas lleguen puesto que nunca les han echado una mano.
En el caso de los apicultores la situación es muy similar: “una colmena vale poco dinero y hay mucha picaresca. No nos van a dar dinero por las cajas quemadas pero el verdadero problema va a ser que vamos a tener que buscar más abejas y que necesitamos que nos den algún tipo de ayuda para tener alimento para los animales porque esta primavera no vamos a tener sustento para ellas”.
Los apicultores locales, Miguel Gimeno y José Luis Orient, de la empresa 'Mieles Lucía', poseen cada uno 200-300 colmenas y denuncian que "las ayudas que da el Estado, están destinadas a grandes apicultores que tengan como mínimo 600 colmenas. Si tienes menos de 400 colmenas no dan ninguna ayuda para poder crecer más y mejorar el equipamiento".
Por su parte, Migue Gimeno, lamenta que "a pesar de ser un mismo país, las Comunidades Autónomas no son iguales. El Gobierno Valenciano aprobó una ley en la que, desde el 1 de marzo hasta el 31 de mayo, está prohibido poner colmenas en zona citrícola y las multas pueden ascender hasta los 60.000€. Aquí nuestro problema principal es “La Pinyolà” en la que se restringe la ubicación de colmenas en zona citrícola por generar una variedad de naranja/mandarina que pueden producir semillas en su interior a causa de la polinización cruzada. Desde el año 1990 hasta el 2000 sí que nos concedían ayudas en este período, pero aquello se acabó y actualmente no recibimos nada".
Por otro lado, José Luis Orient considera que "la climatología afecta mucho y ya se está notando el cambio climático. Desde junio hasta ahora ha sido una temporada difícil porque todo está seco...En mi caso 200 colmenas suelen dar para hacer 20 bidones de miel y este año solo hemos hecho 8 bidones de miel de naranjo, lo que supone un 60% menos de la producción".
"Es necesario que los pequeños apicultores se movilicen porque si no este oficio va a desaparecer y no habrá gente gente joven que continúe este legado. Necesitamos mucho dinero para mantener y alimentar a las abejas y, ello, unido a los tres problemas fundamentales que tenemos hoy en día como son: los incendios, la Varroa (que se come a las abejas) y la sequía, nos pone en una situación crítica", aseguraba Gimeno.