El exlíder del grupo ultra Yomus Vicent Estruch "El Alfarrasí" (c), junto a otros procesados durante la vista por las agresiones durante la manifestación vespertina del 9 d"Octubre de 2017. EFE/Biel Aliño/Archivo
La Audiencia de Valencia ha condenado a la mayoría de los procesados por las agresiones de la manifestación vespertina del 9 d'Octubre de 2017 a un año y cinco meses de prisión, mientras que de los dos acusados que no aceptaron la conformidad uno ha sido condenado a dos años de cárcel y otro absuelto.
Así lo recoge la sentencia de la sección primera de la Audiencia provincial de Valencia, contra la que cabe recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, tras el juicio celebrado el pasado mes de febrero, en el que 26 de los 28 acusados admitieron los hechos y aceptaron condenas de cárcel por delitos contra los derechos fundamentales y multas por lesiones.
De los dos acusados que negaron su participación en los hechos y no llegaron a un acuerdo de conformidad, uno ha sido condenado por dos de los ocho delitos que se le atribuían, a dos años de prisión por un delito de coacciones con la agravante de discriminación ideológica contra varios periodistas, a los que no se podrá acercar durante tres años.
También se le considera autor de un delito leve de amenazas, por el que se le condena a la pena de dos meses de multa con una cuota diaria de 8 euros y un mes de responsabilidad personal subsidiaria, según recoge la sentencia conocida este viernes.
El otro, un locutor de televisión y de radio, ha sido absuelto de todos los delitos, al considerar que los comentarios que hizo no se pueden calificar como discurso de odio, ni se ha acreditado que su actuación tuviera capacidad de impedir o perturbar la manifestación, ni se puede equiparar su actuación con la del resto de acusados.
Respecto a los acusados que han reconocido los hechos, ha quedado acreditada su participación en los hechos y su responsabilidad en ellos, por lo que se les condena en su mayoría a un año y cinco meses de prisión por un delito contra los derechos fundamentales y las libertades públicas, con la agravante de discriminación ideológica.
Asimismo, se les imponen multas por delitos de lesiones y la prohibición de acercarse a las personas que agredieron durante la manifestación de 2017 convocada por organizaciones, partidos, sindicatos, asociaciones y colectivos de la izquierda valenciana con motivo del Día de la Comunitat Valenciana.
La manifestación de hace ocho años se produjo en un contexto de tensión política por el proceso independentista catalán iniciado tras el referéndum del 1 de octubre, y no pudo completar su recorrido debido a la actuación de varias personas de ideología contraria que corearon cánticos y gritos e incluso agredieron a manifestantes y periodistas.
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