El alcalde de firma el convenio que convierte a la Policía Local de Valencia en el primer cuerpo del Estado que va a recibir una formación sobre delitos de odio

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha firmado esta mañana el convenio con la Organización de Seguridad y Cooperación Europea que convierte a la Policía Local de Valencia en el primer cuerpo de policía de ámbito local que va a recibir una formación específica para la adecuada prevención y gestión de los llamados delitos de odio a través del programa TAHCLE.

Antes de la firma de este convenio, en la Central de la Policía Local de Valencia, ha intervenido la concejala de Protección Ciudadana, Sandra Gómez, que se ha dirigido a los asistentes a este acto, entre los que se encontraban la concejala de Igualdad y Políticas Inclusivas, Isabel Lozano, el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, el general de la Guardia Civil, Fernando Santafé, y el comisario jefe de la Policía Nacional, Miguel Gonzáñez, además de la representación de la OSCE encabezada por la subdirectora de la Oficina para las Instituciones Democráticas y los Derechos Humanos, Beatriz Balbín.

Una vez suscrito el documento del convenio, Joan Ribó ha mostrado su satisfacción de que Valencia sea la primera ciudad europea cuya policía local tendrá una formación específica sobre un tipo de delitos en el que las víctimas lo son por su sola pertenencia a un determinado grupo social, raza, etnia, religión, nacionalidad, ideología, orientación sexual o situación social.

Joan Ribó se ha referido a los delitos de odio como “un problema serio y emergente en una sociedad diversa, que implica una transgresión inaceptable del principio de igualdad en el marco de un estado de derecho”. El alcalde de Valencia ha dicho que en nuestra ciudad se contabilizaron 75 delitos de odio en el año 2014, si bien ha remarcado que apenas el 10 % de estos delitos son denunciados. “Cuando el odio, el menosprecio o el prejuicio derivan en delito hay que actuar y tomar medidas”, ha afirmado Ribó, que se ha referido igualmente al hecho de que “cuatro de cada diez delitos de odio tengan una relación directa con la identidad sexual de las víctimas”.

El convenio firmado esta mañana con la OSCE contempla un sistema de formación en cascada, de forma que los 30 policías locales que la recibirán se convierten, a su vez, en formadoras y formadores del resto de sus compañeros “hasta alcanzar a la totalidad de los 1.600 agentes que conforman la plantilla”.

El alcalde Joan Ribó ha resaltado que gracias a este convenio “la Policía Local mejorará las competencias de sus agentes en la prevención y respuesta ante esta modalidad delictiva, sabrá cómo interaccionar mejor con los colectivos victimizados y se potenciará el fortalecimiento de la confianza y la colaboración ciudadana para combatir los delitos de odio”.

Igualmente ha asegurado que una iniciativa como la firma de este convenio con la OSCE para formación en delitos de odio “muestra la vocación de innovación y mejora que estamos impulsando en el seno de la Policía Local de Valencia, porque una ciudad moderna y democráticamente avanzada necesita cuerpos policiales formados en la protección ciudadana ante el odio y la intransigencia, en la defensa de la convivencia, el respeto y la concordia”.

También Sandra Gómez ha incidido en la necesidad de atajar y prevenir “el caldo de cultivo de determinados prejuicios y actitudes en el que se generan los delitos de odio”. Ha incluido en su intervención una cita del que fuera primer ministro sueco Olof Palme donde este afirmaba que “el delito de odio tiene siempre su raíz en lo cotidiano y es expresión muchas veces de la ignorancia y el miedo”

Por parte de Beatriz Balbín, firmante del convenio en representación de la OSCE, se ha destacado que el objetivo es “ayudar a la Policía Local de Valencia a adquirir conocimientos y competencias para atajar los delitos de odio y conseguir, al mismo tiempo, aumentar la confianza de la sociedad en sus agentes y en la labor que desarrollan”.