Cacerolada organizada en "Cuatro Esquinas" del barrio de la Malva-rosa de València para protestar por la venta de droga en sus calles. /EFE La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, ha informado este martes de que el Defensor del Pueblo ha admitido la denuncia que presentó su grupo municipal sobre "el aumento de la inseguridad ciudadana y la falta de policías en las calles".
Catalá espera que el alcalde de València, Joan Ribó, "reaccione de una vez porque ya son dos las instituciones -el Defensor del Pueblo y el Síndic de Greuges- las que han admitido la queja del Partido Popular por la falta de agentes de policía en la ciudad".
En su denuncia, el PP recordaba que, según los últimos datos del Ministerio del Interior, València es "de las grandes ciudades donde más ha aumentado la delincuencia (el 36,5 %) mientras que en Barcelona baja o en Madrid sólo sube un 9 %".
Destaca además el "aumento preocupante" de los robos con fuerza en domicilios (+78,2 %), hurtos (+66,8 %) y un 67,9 % los delitos sexuales.
Catalá señala asimismo que València cuenta ahora "con 200 policías menos que en 2015, y la burocracia y lentitud que caracterizan al gobierno de Ribó está lastrando está falta de policías".
En este sentido, ha denunciado que "aún no están aprobadas las bases de la Oferta de Empleo Público de 2020 ni la convocatoria de 2021 a tres días de acabar el año".
"Esperemos que ahora sí se pongan las pilas porque la inseguridad ciudadana preocupa y mucho a los ciudadanos", insiste.
Por último, el PP recuerda que el presupuesto de Ribó y el PSPV para 2022 "sólo contempla crear una plaza más de policía local, mientras que el número de vacantes aumentará un 10 %, es decir, habrá 40 policías menos".
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