El FIB de los abanicos, el calor, las colas y el "remember" cierra su edición 27

La 27 edición del Festival Internacional de Benicàssim cierra hoy sus puertas con un respaldo masivo de público nacional tras cuatro días de música agitados a ritmo de abanicos para mitigar el calor y la humedad y con música que ha hecho regresar al público muchos años atrás con bandas como The Offspring o con los temas "remember" de los numerosos DJs que han pasado por los escenarios.

Si en algo han coincidido en esta edición los artistas ha sido en destacar el calor sofocante que ha hecho estos cuatro días en Benicàssim, sobre todo por la altísima humedad que ha hecho sudar la gota gorda tanto a los artistas nacionales como a los internacionales.

Iván Ferreiro, ese gallego incombustible que ha ofrecido hoy uno de los mejores conciertos del FIB 2023, ha puesto de manifiesto el calor que estaba sufriendo y ha asegurado al público que "si os sirve de consuelo, nosotros también estamos achicharrados".

Las Ginebras, convertidas ayer en las reinas del pop patrio en el escenario principal no solo mostraron su emoción por tocar en el FIB como cabezas de cartel, sino que contaron también que este recinto les inspira a componer temas. Este año, indicaron, esa nueva canción podría llamarse "abanicos de colores".

No en vano el abanico ha sido el arma más eficaz para aliviar levemente la sensación de estar "pegajoso" y ha sido solo una prueba más para dejar constancia que definitivamente el FIB ya no es un festival para los británicos, sino para los españoles, bien entrenados en el uso de este aire acondicionado de mano y sostenible.

Si bien las gerencias británicas del festival de los últimos años hacían esfuerzos por ganar cuota entre el público patrio, desde que The Music Republic comprara la marca en 2019 -y con la pausa de la pandemia de 2020- el FIB se transformó en otro gran festival con predominio de las bandas españolas que giran en este momento y ya rendido por completo al público español, en su mayoría de proximidad.

Con algunos guiños al pasado, bandas como Kaiser Chiefs, The Wombats, Bastille, o Franz Ferdinand, han traído reminiscencias del pasado y el debut de The Offspring en las tablas del FIB ha sido uno de los platos fuertes de esta edición con una gran actuación que atrajo un número tan elevado de asistentes que provocó un monumental atasco de varias horas en los accesos, tanto al inicio de la jornada como al final.

También ha habido tiempo para algunas novedades, como el refrescante concierto de las británicas Wet Leg o la presentación de los temas de "Trinchera Pop", el último trabajo de Iván Ferreiro o de Belako que estrena "Sigo regando", el cual verá la luz en septiembre.

Y amenizando cualquier hora y cubriendo los tiempos entre conciertos, los DJs han desplegado un gran arsenal de temas "remember" y en muchas sesiones se ha podido escuchar los míticos temas de Pont Aeri, especialmente "Flying Free". Los temas de Abba, Fat Boy Slim, Spice Girls, Daft Punk o de la música disco de los 70, han sido asimismo un fijo en estas sesiones.

Tras tres días de música y fiesta, la jornada del domingo ha registrado una entrada de público más modesta, y aún así muy elevada, y ha sido Iván Ferreiro el que ha abierto las actuaciones en el escenario principal. Calor aparte, el de Nigrán ha presentado temas de su último trabajo, que te recuerdan que "todo lo que cura te aguarda en las trincheras de la cultura pop".

Además, con generosidad hacia su público, ha vuelto a tocar "Turnedo" o "Años 80", esos temas que forman parte del patrimonio musical español y que superan todas las trabas del tiempo y la distancia.

El cierre ha contado también con los británicos Bastille, con un set que ha triunfado especialmente con los temas de su álbum más escuchado "Bad Blood", la británica Mimi Webb o el estadounidense Benson Boone.

De la parte española, han actuado además Ciudad Jara, Depedro, Amatria o La MODA y le cierre lo pondrá la banda de origen británico asentada en España, Crystal Fighters, con su habitual fiesta "rave" de exaltación del amor.

Así pues cerrará sus puertas de nuevo el recinto de conciertos de Benicàssim, y lo hará, esta vez, con la sombra de un rumor que apunta a la posible compra de la marca por parte de un grupo inversor.