Los vehículos incendiados. EPDAAlboraya se ha convertido en el gran municipio de la Comunitat Valenciana donde más crecen los delitos en lo que va de año. Con una media de 5,5 delitos al día y un incremento del 31,4% según el Ministerio del Interior, la inseguridad es ya una realidad innegable.
Desde el Partido Popular de Alboraya "denunciamos la absoluta dejadez del gobierno municipal formado por PSOE y Compromís, que ha permitido que el municipio entre en una auténtica oleada delictiva sin una estrategia clara de seguridad ciudadana ni refuerzos policiales".
Datos
Durante el primer trimestre de 2025 se han denunciado 498 delitos en Alboraya. El dato sitúa al municipio como el primero en criminalidad creciente entre las localidades de más de 20.000 habitantes en toda la Comunitat Valenciana. Entre los delitos más habituales figuran los hurtos (93), estafas informáticas (63), robos con violencia (12), robos en viviendas y locales (11) y cinco delitos contra la libertad sexual, lo que representa un incremento del 400 % respecto al mismo periodo del año anterior.
"Todo esto sucede mientras el ayuntamiento de Alboraya, gobernado por PSOE y Compromís, sigue sin adoptar medidas para frenar esta crisis. Hasta hace pocas semanas, una única patrulla con dos agentes trataba de cubrir cada noche a más de 26.000 vecinos", explican los populares.
Indignación vecinal
La indignación vecinal ha alcanzado niveles inéditos. En zonas como La Patacona, los propios residentes han colocado carteles en sus coches con mensajes como “Por favor, no me entres a robar” o “Coche vacío. No rompa la puerta”, ante los reiterados robos en plena calle. En una situación límite, algunos vecinos incluso han tenido que reducir por su cuenta a un delincuente sorprendido robando a plena luz del día, como narran desde el PP.
Mientras tanto, el núcleo urbano tampoco escapa a esta ola de inseguridad. En las últimas semanas se han producido robos con violencia, entradas en viviendas y hasta la quema de ocho vehículos en pleno Paseo de Aragón que también afectó a una vivienda. Todo ello sin una respuesta contundente por parte del gobierno municipal.
El episodio más llamativo de cara al inicio de la temporada de verano se vivió el pasado 18 de mayo, cuando un grupo encapuchado accedió con martillos y hachas a una horchatería de Port Saplaya. Este nuevo robo, que se suma al que ya sufrieron hace dos años, afecta profundamente a uno de los establecimientos emblemáticos de Alboraya, cuna de la horchata, y deja en evidencia el abandono institucional que sufren los comerciantes.
Desde el Partido Popular de Alboraya "consideramos intolerable la pasividad del gobierno de PSOE y Compromís ante una situación que lleva años agravándose. No existe un plan de seguridad, no se escucha a los vecinos y no se da respuesta a las víctimas. La responsabilidad es clara: la falta de medios es consecuencia directa de la falta de voluntad política".
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