Ayuntamiento/EPDA El Partido Popular de Benetússer ha
exigido al equipo de gobierno de PSOE y Compromís que se pongan «manos a la
obra» en la actualización de las ordenanzas municipales y, en especial, la
relativa a la convivencia ciudadana.
«Llevamos más de 4 años pidiendo que se
revisen las ordenanzas municipales. Benetússer ha evolucionado como sociedad y
no nos podemos regir por una normativa obsoleta», ha asegurado Laura Chuliá,
portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento.
El Grupo Popular lamenta que el actual
gobierno de izquierdas se resista a «comenzar a planificar y modificar
cuestiones que son básicas y resultan de especial impacto en el día a día de
los vecinos».
Desde 2010 sin revisar
Chuliá comparte las quejas de los
vecinos y ha recordado que «durante el último pleno pedí a la alcaldesa, Eva
Sanz, que se comprometiera a revisar la ordenanza municipal de convivencia
ciudadana que se aprobó en 2010».
Hasta la fecha no se ha producido
ninguna novedad al respecto por lo que Chuliá considera que «el gobierno de
PSOE y Compromís debe entender que es lo mismo sancionar igual a un menor que
se encuentra generando molestias por continuos silbidos intencionados hacia un
evento que a quién se encuentra realizando tareas de mantenimiento del vehículo
en la vía pública vertiendo el aceite de motor del vehículo».
Cuestiones como ésta –que suponen una
multa de 30,05 euros en ambos casos– se recogen en la citada normativa de
convivencia ciudadana y por ello desde
el Grupo Popular llevan años poniendo en evidencia las incoherencias que avala.
«En una
sociedad como la actual no podemos imponer el mismo castigo a un menor que
silba que a quien cambia el aceite de su coche en plena calle y sin limpiar los
vertidos. No tiene ningún sentido y esta normativa incluye muchas más
incoherencias que han de ser revisadas», ha concluido la portavoz popular.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia