Ayuntamiento de Vilamarxant./EPDAEl Partido Popular
de Vilamarxant comunicó a las autoridades competentes las irregularidades administrativas que implicarían a los dos concejales de Ciudadanos y, posteriormente,
los ediles fueron cesados de
sus competencias en el equipo de gobierno. Las irregularidades fueron halladas cuando
se puso en conocimiento del alcalde una información sobre un expediente de contratación cuya gestión no había seguido los requisitos
legales. Desde ese momento, se iniciaron una serie de averiguaciones internas y
se requirió documentación acreditativa a diferentes departamentos, lo que
terminó avalando las sospechas iniciales y constando la existencia de indicios claros de una
grave alteración de un
proceso de
contratación, lo que podría conllevar una vulneración de la ley.
Ante estas evidencias, y lo que suponen para el ayuntamiento y sus bienes, el alcalde comunicó
los hechos a las autoridades competentes. Esta comunicación se realizó
antes de que Ciudadanos emitiera un comunicado en el que acusaba sin fundamento
a los populares de presionar al funcionariado para manipular un proceso
policial. Aunque los ceses estaban ya previstos, esta acusación precipitó la decisión del PP de apartar del gobierno a los dos concejales
por la falta de confianza ya probada y a expensas de que las autoridades se pronunciaran. Sin embargo, finalmente, fue el propio
CS el responsable de dinamitar su pacto de gobierno con el
PP al renunciar a sus delegaciones.
Tras anunciar los ceses, el alcalde puso en conocimiento de los grupos de la oposición el motivo de esta decisión. Tanto el PSPV como ‘Acord per Vilamarxant’ son conocedores de la
información recabada sobre las irregularidades que han sido ya comunicadas a las autoridades responsables.
“Nuestra obligación era recabar toda la información y, ante la existencia de indicios claros,
dar traslado a las autoridades responsables. No podemos tolerar que en
este gobierno haya personas que, con sus acciones, pongan en entredicho la
reputación de toda una administración”, explican los populares. “Hemos
hecho lo que se espera
de todo gobernante: preservar la integridad del ayuntamiento y
velar por sus intereses y los del municipio, incluso
si eso pone en peligro nuestro
lugar en el gobierno”.
Así, el Partido Popular de Vilamarxant pone fin a las dudas y
especulaciones en torno a la situación con la intención de centrarse en sacar adelante el gobierno municipal: “Nuestro deber ahora es alejarnos del ruido y, mientras sea posible, continuar
gobernando aun estando en minoría, y para ello buscaremos los acuerdos necesarios para garantizar el bienestar de nuestro
pueblo. El resto está ya manos de las autoridades”.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia