Javier Lambán. /EPDA
Molesto
con Ximo Puig y crítico con la capacidad de Sagunto para acoger la
codiciada planta de baterías eléctricas que Volkswagen pretende
instalar en España. Este es el resumen de las declaraciones que el
Presidente de Aragón, Javier Lambán ha hecho al periódico digital
El Confidencial y que aparecen reproducidas hoy.
Desde
Aragón se considera que el anuncio público de la Generalitat
Valenciana sobre la expropiación de terrenos de Parc Sagunt es una
jugada que incumple las reglas del juego que se establecieron al
principio de las negociaciones donde se pactó una confidencialidad
en los movimientos que se hicieran para atraer la codiciada planta de
la multinacional alemana.
Pero
Lambán, que lógicamente apuesta por la instalación de la fábrica
de batería en la localidad zaragozana de Zuera, fue un paso más
allá al declarar públicamente que Sagunto no es la mejor opción ya
que, en su opinión, no puede competir con Zaragoza en dos aspectos.
Más
concretamente Lambán puso como atractivos de Zaragoza “el
clima de acuerdo y paz social que hay en Aragón”,
y que, siempre en su opinión, Zaragoza tiene una mejor ubicación ya
que tiene conexión directa de carretera con la fábrica de SEAT en
Martorell, dejando
claro que la candidatura valenciana vuelve a sufrir los retrasos del
Corredor Mediterráneo, y con la de la propia Volkswagen en Navarra,
e incluso hace valer, paradójicamente, la conexión ferroviaria
directa entre Zaragoza y el puerto de Sagunto.
A
pesar de que, tal y como recogió este medio, el digital OK Diario,
anunció que Volkswagen ya se había decantado por la opción
saguntina como la sede de su factoría el anuncio oficial no se
concreta y la previsión es que no lo haga hasta que el gobierno
central no anuncie los fondos PERTE (Proyectos
Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica)
donde se establecerán las ayudas que recibirám iniciativas como la
de Volkswagen para la instalación de plantas en cualquier punto de
España.
De
momento lo único que parece seguro es que en la carrera por hacerse
con la codiciada planta ya no participan Cataluña, que se descartó
en una fase muy temprana, y Extremadura cuyo presidente autonómico,
Guillermo Fernández Vara, ya hizo declaraciones públicas
reconociendo que su territorio se había quedado fuera de las
preferencias de la multinacional alemana. Mientras tanto la
Generalitat Valenciana sigue sabiéndose favorita y ya ha empezado la
expropiación de terrenos a la espera de que acabe esta tensa espera.
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