Hijos de los fusilados en el inicio de los trabajos de excavación en la Fosa II de Paterna Tenía apenas tres años de edad cuando, de la mano de su madre, Fernando Castelló, visitó el cementerio municipal de Paterna. Han pasado ochenta años desde ese día, pero su mente ha conservado un vago recuerdo de las palabras de su progenitora sobre el lugar donde supuestamente yacen los restos de su padre después de que al alba de un 16 de mayo de 1941 fuese ejecutado frente al muro del Paredón de España junto a otras veinte personas. Ese testimonio, unido al de otros descendientes de las víctimas, como el de Carlos Talens -hijo de un republicano de Carcaixent- ha guiado a los investigadores en la búsqueda de nuevos restos de represaliados del franquismo.
Los trabajos de excavación se han trasladado ahora a la parte trasera del cementerio de esta localidad. Allí han empezado las obras para la apertura de la fosa II, la primera que se abre en el segundo cuadrante, donde se espera hallar distintas sacas con los restos de víctimas tanto de la retaguardia republicana como del franquismo, según ha informació la Diputació de València, que subvenciona el coste del proyecto a través del área de Memoria Histórica. Hasta ahora se había trabajado en el primer cuadrante donde las investigaciones previas había permitido tener bastantes detalles de las fosas antes de las excavaciones. En este segundo cuadrante todo es más difuso. La nueva fosa, que alberga a los hombres fusilados a partir de 1941, a diferencia de lo que es habitual, no está señalizada y pese a conocerse su existencia no podía asegurarse cuál era su ubicación concreta.
El testimonio
Las indagaciones se vieron impulsadas por los testimonios de Fernando Castelló y de Carlos Talens, quien visitó Paterna con su madre cuando hacía la mili y fue ella la que le indicó dónde estaba enterrado su padre. Estos testimonios se pudieron confirmar finalmente con los resultados del georadar, que durante 2020 se empleó para asegurar la existencia de restos en la zona. Las noticias orales y la prospección del georadar hablan de diversas fosas tanto de la retaguardia republicana como de la época franquista, en el suelo de este patio, todas ellas sin señalizar. Además, se tiene constancia de que de ellas se extrajeron cuerpos para trasladarlos al Valle de los Caídos, aseguraron las fuentes del organismo provincial.
Las primeras excavaciones, que están siendo llevadas a cabo por el equipo de ArqueoAntro, se centran en la saca que corresponde al 16 de mayo de 1941, día en el que fueron asesinadas 20 personas; cuatro de ellas fueron enterradas en nichos individuales y el resto se cree que continúan en la fosa.
Fernando Castelló recordaba ese lugar de su visita al campo santo cuando era un niño. Sus recuerdos son borrosos, pero la ubicación sí parece ser la correcta y coincidente con el lugar señalado por Carlos Talens. El lunes de la semana pasada, Fernando, Carlos y otros hijos de fusilados cuyos restos podrían estar en este punto del cementerio municipal acudieron al comienzo de los trabajos. Estos octogenarios de la comarca de La Ribera no dudaron en coger con sus manos el pico y empezar a cavar el agujero que, después de muchos años de espera, podrá llevarle a recuperar los restos de sus padres. Emociones, sentimiento a flor de piel y el resultado de la lucha incansable de muchas personas que llevan toda una vida buscando a sus seres queridos.
En esta lucha los ha acompañado Silvia Talens, presidenta de la Asociación Víctimas del Franquismo La Explanada Paterna-Valencia, cuyo abuelo fue enterrado en esa parte del cementerio de Paterna. Silvia quiso agradecer el apoyo que ha tenido “y que ha sido fundamental” tanto de Matías Alonso, presidente del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica de la Comunidad Valenciana, como de la Diputació de Valencia “sin cuya ayuda todo esto no hubiera sido posible”. Silvia vivió con gran emoción este momento con el que tanto han soñado ella y su padre Carlos Talens y que les permitirá “poder llevar a casa al abuelo”.
La Diputació de València mantiene de este modo su apuesta por la memoria histórica dando respuesta a las peticiones de familiares que se movilizan para recuperar los restos de seres queridos que fueron represaliados en el marco de la Guerra Civil y la dictadura franquista. La delegación de Memoria Histórica del organismo provincial afronta el quinto año de su política de subvención de exhumaciones e identificación genética de los fusilados. En palabras del diputado Ramiro Rivera, “es necesario que sigamos trabajando por la dignidad de todas las personas que fallecieron por sus ideas”.
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