Refrescos. / EPDA El sector de las bebidas refrescantes aumenta su impacto en la Comunidad Valenciana con una contribución económica que supera los 800 millones de euros de valor añadido bruto (VAB) total en la región. El Informe de Impacto Social y Económico del Sector de Bebidas Refrescantes en España, realizado por la consultora financiera AFI, constata su peso a nivel autonómico y también nacional; su aportación al conjunto de la economía española ya supera los 10.700 millones de euros y en el último año ha crecido un 15%.
La industria reafirma su potente efecto tractor en otros sectores estratégicos en la región como la agricultura, hostelería o distribución. El impacto se ve reflejado en que por cada euro de valor añadido que se genera en la industria, se revierten casi 3 euros en el total de la economía.
El peso del sector también se materializa en la creación de empleo. La industria de los refrescos genera más de 13.000 puestos de trabajo en la Comunidad Valenciana, de los cuales 7.000 son directos. A nivel nacional, la cifra alcanza los 176.000.
La región cuenta con un total de 15 centros de actividad distribuidos por todo el territorio. Esta industria, que tiene más de 200 años de historia, se caracteriza por su arraigo y presencia en todas la comunidades autónomas. Del total de centros de actividad situados por toda España, el 15% se encuentran en zonas rurales, actuando como dinamizadores de los municipios donde se ubican.
La Comunidad Valenciana, junto a Andalucía, Cataluña, Galicia y País Vasco son las que albergan el 60% de los centros productivos y generan más de 4.000 millones de euros de aportación económica y cerca de 66.300 puestos de trabajo en total.
Crecen las ventas de refrescos y las variedades sin azúcar
El sector de las bebidas refrescantes consolida la recuperación postpandemia y crece un 15% en ventas hasta superar los 4.300 millones de euros. El buen comportamiento del comercio exterior contribuye a estos resultados, con un superávit comercial en máximos. También favorece la estabilidad del consumo interno, puesto que el 94% de los refrescos que se consumen en España se elaboran en el país.
El consumo de bebidas refrescantes en España también se recupera a niveles previos a la pandemia. En 2022 se comercializaron 4.357 millones de litros, un 10% más que el año anterior, gracias al auge del turismo y la recuperación del canal hostelero, que es el principal canal de consumo de esta categoría (60%). Si nos fijamos sólo en el consumo de los españoles, el consumo per cápita se sitúa en torno a los 47 litros anuales, reflejo del estilo de vida mediterráneo y social que caracteriza al país. De hecho, 8 de cada 10 ocasiones de consumo de los españoles se producen en momentos de encuentro y ocio en compañía de familiares y amigos.
Además, aumenta la demanda de las variedades bajas y sin calorías, que ya suponen un 60% de la oferta de bebidas refrescantes en el mercado, con un crecimiento del 4,4% en su consumo en el canal hostelero.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia