Una de las jugadas del Valencia. FOTO VALENCIACF.COM El
partido ya empezó con incidencias, ya que se retrasó su inicio unos
minutos debido a varios apagones en el campo de Mestalla, un encuentro
en el que se quería alagar a los patrocinadores asiáticos del Valencia,
luciendo los dorsales en chino.
Tras
un inicio de partido con mucha concentración de los dos equipos, fue el
athletic el que llevo el control de los primeros instantes de
encuentro. Es en el minuto 22 cuando Feghouli en posición de fuera de
juego recibe el balón para darle el pase a Paco Alcacer, y que este
ponga el 1-0 en el marcador, gol que no debería haber subido al luminoso
de Mestalla, por la posición incorrecta del argelino. Esta decisión
incorrecta, no fue ni la primera ni la última, ya que tuvo un arbitraje
muy desmedido y desigual durante toda la primera parte, que finalizó
sin un dominio claro de ninguno de los dos equipos, aunque con más orden
en las filas visitantes.
La segunda
mitad inicia con más polémica, porque en el minuto 8 y tras un penalti
inexistente que solo vio el colegiado, y asi empato un Athletic, de las
botas de Aduriz, que estaba desaparecido en el campo, estableciendo asi
el 1-1 definitivo. Fue tras el empate, cuando el Valencia saco más
garra, para buscar el gol, un premio que no llegaría en el resto del
encuentro, pese al dominio claro del equipo che en la segunda parte.
EL NUEVO VALENCIA DE PIZZI
El equipo de Antonio Pizzi,
cada día coge más solera, mas crédito, es más equipo. Un entrenador que
ha infundido confianza en los jugadores de la cantera, y ha sabido
aprovechar los recursos existentes en el vestuario, ha dado la vuelta a
una situación crítica, marcada por la mala imagen, y los malos
resultados de la primera vuelta.
La cantera,
hoy representada de maravilla por el argentino Fede, Bernat, y Alcacer,
deja muy alta la estima de la afición con el trabajo realizado desde
las categorías inferiores. Una cantera a la que la afición siempre ha
tenido gran cariño, y de la que el actual entrenador ha sabido sacar
todo lo mejor y exprimirlo hasta la última gota, para dar frescura y
descaro a un equipo que en la primera vuelta era incapaz de ilusionar a
la afición.
Los nuevos fichajes
de invierno han entrado con garra en el equipo, dando intensidad para
luchar por los puestos del primer equipo, a la vez que se han sabido
integrar muy bien a las órdenes del nuevo entrenador.
El equipo existente, que ha demostrado que ahora sí que se empapa del mensaje de Pizzi, y sí que entiende el juego, y las demandas del entrenador.
Y
aunque todavía hay altibajos, como en el último encuentro en Vallecas,
todo hace pensar que la recta final de la temporada, el valencia hará
que Mestalla este mas lleno de aficionados que acudirán con ilusiones
renovadas. Con la sensación de que un partido que se va perdiendo se
puede remontar, y que un partido contra un grande, no supondrá una
humillación segura, y que con este equipo y este espíritu de lucha se le
puede ganar a cualquiera.
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