El Ayuntamiento de València estudia la viabilidad de sustituir los estanques del Palacio de Congresos por zonas verdes con el fin de salvaguardar la estructura del edificio, evitar riesgos para la salud y ahorrar unos gastos de 18.000 euros anuales.
La concejala de Economía Sostenible, Sandra Gómez, ha informado del inicio de los trámites para estudiar esta alternativa, que también tendría un impacto positivo para el medio ambiente, ya que el mantenimiento de los estanques supone la utilización de productos contaminantes como el cloro y los alguicidas.
De acuerdo con la propuesta presentada al Consejo de Administración del Palacio de Congresos, que se reunirá este miércoles, desde que el edificio se inauguró en 1998, se han detectado fugas de agua en todos los estanques, ha informado el Ayuntamiento.
El informe establece que entre los puntos donde se producen estos escapes se encuentran los laterales, los canales de recogida de agua de pluviales, los tubos que conducen el agua desde la sala de máquinas hasta los estanques y los tubos que unen el paso entre estanques del mismo circuito.
La retirada de los estanques supondría salvaguardar la propia estructura del edificio y aumentaría la seguridad de las personas al evitarse las caídas, y además eliminaría la posibilidad de generar la bacteria Legionella, una situación que se detectó en un test rutinario de febrero de 2013.
Además el informe calcula que el ahorro por el concepto de mantenimiento de los estanques ascendería a 18.000 euros anuales.
Según Gómez, se podría habilitar este espacio para otros usos y reconvertirse, por ejemplo, en zona verde. En cualquier caso, la concejala ha remarcado que se trata de una propuesta que tiene que estudiarse para determinar la viabilidad de sustituir los estanques.