Javier Sanchis. EPDA A lo largo de una legislatura, hay momentos y fechas que son imposibles de olvidar y que con el paso de los años, se evocará con satisfacción y alegría. El 17 de Noviembre de 2021 es uno de esos días que recordaré por siempre. Tal día, salió de Aldaia una comitiva con destino a Madrid, para estar en el Senado y hacer fuerza para que se aprobara el reconocimiento de nuestro Tribunal del Comuner del Rollet de Gràcia de l´Horta d´Aldaia, como Tribunal tradicional y consuetudinario. Como era de esperar, se aprobó en la Cámara Alta de representación territorial, y tan solo queda un paso más para la aprobación definitiva por el Congreso de los Diputados, que esperemos suceda en unas pocas semanas.
El grupo de personas que formamos esa “comitiva aldaiera”, estaba compuesta por el Alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, los cuatro portavoces de los grupos municipales, Empar Folgado, Carmen Jávega, Lluis Albert Granell y el que suscribe este artículo. También nos acompañó el concejal Felipe Rentero y el coordinador de medios de comunicación Eugeni Chillida y por parte del Tribunal del Comuner, el máximo representante, su presidente Pepe Bonet y la síndica miembro del Tribunal, Amparo Guasp.
Fue una jornada histórica para el reconocimiento de esta institución del riego que tiene jurisdicción sobre la huerta y que fue recuperada en 2014. El Tribunal del Comuner es el órgano de riego, donde los regantes de l´Horta deben de dirimir sus conflictos, sin necesidad de ir al Tribunal de las Aguas de Valencia, al contrario que las demás acequias que riegan el río Turia y que están sometidas a la jurisdicción del conocido Tribunal de Valencia.
El Rollet de Gràcia toma las aguas de la acequia de Benáger, y la administración de estas aguas corresponde a los vecinos de Aldaia, por eso están exentos en caso de conflictos, de acudir al Tribunal de las Aguas. La verdadera función del Tribunal del Comuner, es garantizar el buen funcionamiento de los usos del agua y de los canales de riego que conforman el Rollet de Gràcia.
Nuestro Tribunal del Comuner merece todo nuestro apoyo y reconocimiento, un apoyo sin fisuras de todas las fuerzas políticas, y que en el viaje a Madrid ha quedado demostrado que cuando queremos ir todos juntos en busca de un fin concreto, se consiguen los objetivos.
Me queda transmitir mi ENHORABUENA A TODAS las personas, que han trabajado por este reconocimiento legislativo. Los aldaieros y aldaieras pueden sentirse muy orgullosos de su patrimonio cultural y etnológico. El Tribunal del Comuner, como ejemplo de patrimonio local, debe ser protegido desde todos los estamentos y darlo a conocer a las generaciones futuras. Solo así, podrán valorar el legado de nuestros antepasados.
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