Los trenes de cercanías han dejado de ser un medio fiable para los vecinos de Camp de Túria. /EPDAUsuarios de la Línea C3 de Cercanías de RENFE sufren casi a diario problemas para llegar a sus compromisos en Valencia por culpa de la errática gestión de este servicio público por culpa de la operadora pública de trenes.
A pesar de que el malestar se extiende por toda la comarca, el mayor número de quejas se concentra en la estación de Loriguilla-La Reva, una estación que, oficialmente, une nuestra comarca con el centro de Valencia en un tiempo que va entre los 35 y los 42 minutos puesto que dependiendo la hora en la que se coja hay variaciones en el recorrido, sin embargo estas cifras no permiten a los usuarios organizar tranquilamente sus trayectos.
“La frecuencia para la estación es de un tren cada hora, pero para ir seguro has de estar allí dos horas antes, porque si se cancela un tren no te quedará más remedio que esperar al siguiente. Por ejemplo ayer no pasó el de las 9 de la mañana y nos tuvimos que esperar hasta que llegó el de las 10:15” explica J.C. uno de los últimos afectados por estos trenes.
Lejos de ser un hecho puntual las cancelaciones se convirtiendo en algo habitual ─“todas las semanas le pasa a alguien” explica J.C. ─y están desincentivando el uso del transporte público en la comarca. “Este tren lo cogen sobre todo estudiantes y trabajadores del centro del capital, si tienes un examen a primera hora, o has de estar en la tienda para la apertura a las 10 de la mañana y el tren de las 9 decide que no pasa, estás perdido” confirma este indignado vecino.
Los vecinos se muestran completamente desamparados ante la situación, de hecho J.C. señala que aquellos que han presentado quejas a RENFE se han encontrado con que la única respuesta de la compañía es la opción de devolverles el dinero, una compensación que no sólo es insuficiente para la gente que depende del tren para no perder su trabajo, sino que se queda en nada cuando el usuario es un estudiante que tiene derecho al uso gratuito del tren de cercanías.
La situación ha llevado a que cada vez menos vecinos opten por usar el tren y entre los más indignados se ha llegado a pensar que lo que buscan los retrasos es reducir el número de usuarios para justificar la eliminación de paradas en esta línea.
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