Bloques de viviendas en Llíria. /EPDA Encontrar un cartel de 'se alquila' en un balcón de algún edificio del Camp de Túria se ha convertido en una tarea prácticamente imposible. La falta de oferta de vivienda en alquiler ha llegado a la comarca, unida al auge de los precios. Así, en uno de los principales portales inmobiliarios del país, se ofertan tan solo 270 viviendas para arrendar en el Camp de Túria, un territorio que roza los 180.000 habitantes. Es decir, habría una vivienda disponible para alquilar por cada 660 habitantes.
Gran oferta de chalés
A todo esto hay que añadir el hecho de que las urbanizaciones de chalés han pasado a ser, sin duda, una pieza característica del entramado urbano de muchos municipios de la comarca, como Bétera, l'Eliana, San Antonio de Benagéber, Nàquera o Riba-roja de Túria. Y son precisamente estas cinco localidades las que cuentan con una mayor oferta de viviendas en alquiler.
En el caso de Bétera, hay un total de 77, pero solamente ocho en el casco urbano. En esta zona, la oferta oscila desde los 800 euros al mes de un piso de 77 metros cuadrados hasta los 2.500 euros de un chalet que se alquila por periodos de uno a once meses. El grueso de la oferta se concentra en la urbanización Torre en Conil-Cumbres de San Antonio, una zona donde la vivienda más barata es un piso de 80 metros cuadrados por 1.100 euros al mes y, la más cara, una mansión de lujo de más de 600 metros cuadrados por 12.500 euros.
42 son las viviendas disponibles en l'Eliana, de las que 19 están situadas en el casco urbano, zona en la que se puede encontrar desde un estudio de 60 metros cuadrados por 650 euros hasta pisos por 900 y 1.000 euros. El resto son chalés que cuestan más de 2.000 euros al mes.
La oferta en San Antonio de Benagéber asciende a un total de 34 viviendas. Entre ellas, tan solo se puede encontrar un piso de 143 metros en un complejo con piscina por 1.400 euros al mes. El resto son adosados y chalés que oscilan entre los 1.350 y los 4.500 euros al mes.
En el caso de Nàquera, son un total de 23 las viviendas en alquiler, solo cinco en el casco urbano. El piso más barato, con una superficie de 60 metros cuadrados, cuesta 570 euros al mes, mientras que el más caro, un ático de 188, 1.300 euros al mes. Los chalés de las urbanizaciones son las que configuran el grueso de la oferta: desde 1.000 euros al mes hasta los 10.000 de una villa de lujo de 1.442 metros cuadrados y 16 habitaciones.
Riba-roja de Túria cuenta con 21 viviendas en alquiler, aunque únicamente tres se encuentran en el núcleo urbano: dos pisos de 80 metros por 750 y 775 euros al mes, y un dúplex de 135 por 1.200 euros. El resto de la oferta la conforman chalés en las urbanizaciones por más de 1.500 euros al mes.
En el caso de la capital, Llíria, también son los chalés de las urbanizaciones los que presentan una mayor oferta. De las 18 viviendas disponibles en la ciudad, siete están en el casco antiguo y oscilan entre los 700 y los 900 euros al mes, mientras que el resto de viviendas cuestan más de 1.000 euros al mes.
En una situación similar se encuentra la Pobla de Vallbona, con 19 viviendas disponibles, siete de ellas en el núcleo urbano. En esta zona se pueden encontrar pisos por entre 700 y 950 euros al mes, mientras que en las urbanizaciones la vivienda más barata cuesta más de 1.000 euros al mes y, la más cara, 12.000.
Menos de 10 viviendas
El resto de municipios de la comarca tiene una oferta inferior a 10 viviendas en alquiler. A excepción de Serra, que cuenta con 11, todas ellas casas o chalés. Desde una planta baja en el centro por 600 euros al mes hasta chalés que van de los 750 a los 3.400 euros.
Benaguasil y Vilamarxant tienen una oferta de seis viviendas. El primero, desde un piso por 650 euros al mes hasta casas de pueblo y adosados por 1.500. El segundo, tres pisos por 550, 650 y 800 euros y, el resto, casas o chalés desde 1.300 hasta 2.000 euros.
Por su parte, Olocau cuenta con cinco viviendas disponibles que van desde un piso de 120 metros cuadrados por 750 euros al mes hasta chalés en las urbanizaciones por más de 2.500 euros.
La oferta de Benissanó se queda en cuatro viviendas, con un ático por 750 euros al mes y adosados por 1.000 euros.
Marines cuenta con dos chalés por 850 y 900 euros al mes; mientras que Gátova solo tiene una casa por 1.000 euros al mes; y Casinos, un chalet de 325 metros cuadrados por 2.600 euros al mes, con opción de alquilar meses sueltos, con un mínimo de tres.
Destacan los casos de Domeño y Loriguilla, que no cuentan con ninguna vivienda en alquiler.
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